La Fiscalía General de la Nación y la DIJIN, tras dos años de investigación dejaron al descubierto a una peligrosa banda criminal que se encargaba de fabricar, adulterar medicamentos en la capital del país. Fármacos que muy posiblemente eran expendidos a los ciudadanos.En las diligencias investigativas, lograron detectar que son 10 individuos que se dedicaban a esta acción criminal. Fueron capturados en el desarrollo de la Operación Anabólicos, adelantada por la Institución. Aseguran que la organización criminal se dedicaba a la fabricación y adulteración de medicamentos, suplementos proteicos, hormonas de crecimiento y reconstituyentes, entre otros productos, que representaban un grave riesgo para la salud de los ciudadanos.
Durante el proceso de captura, los uniformados incautaron más de una tonelada de elementos, entre los que figuran 5 máquinas para la fabricación de medicamentos, más de 1.700 productos de distintos laboratorios, al menos 3.300 cajas para empacar sustancias adulteradas, 7.500 adhesivos, 1.000 etiquetas, celulares, discos duros y una plancha con artes de los productos falsificados.En el operativo, los oficiales capturaron de manera simultánea a los presuntos integrantes de esta red en Bogotá, Bucaramanga y Girón (Santander). Los detenidos tenían roles definidos como fabricantes, imitadores de productos y comerciantes. Le invitamos a leer: Mi Vacuna : Consulta cuándo y dónde te corresponde la dosis contra el coronavirus La fachada que usaban para expender los productos, era un presunto laboratorio que patentaba medicamentos y anabólicos fraudulentos, creados a partir de insumos para uso veterinario, además de otros elementos como cemento y cal. Tal es la magnitud del asunto, que la investigación adelantada por la Fiscalía, pudo determinar que los criminales, compraban medicamentos certificados de otros laboratorios y los adulteraban. Los principales clientes de la banda criminal que eran personas que se dedican al levantamiento de pesas y otras actividades deportivas. Esta red comercializaba sus productos a través de redes sociales y realizaban la entrega de los mismos a domicilio ya que contaban con establecimientos o puntos fijos de venta. Según las autoridades sanitarias, el consumo de dichos medicamentos adulterados puede tener consecuencias adversas para la salud como problemas renales, hepáticos, formaciones de tumores y desórdenes hormonales. Incluso, su consumo excesivo y prolongado podría causar hasta la muerte.
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