Amenazas a algunos alcaldes del Gualivá y Tequendama, provendrían de la delincuencia común o de habitantes inconformes frente a decisiones administrativas
El gobernador Nicolás García encabezó un Consejo Extraordinario de Seguridad en la cual analizó la preocupante situación de presuntas amenazas a algunos alcaldes de las provincias del Gualivá y Tequendama.
Acompañado del secretario de Gobierno, Juan Carlos Barragán, representantes de la Policía Nacional, el Ejército de Colombia y la Defensoría del Pueblo Regional Cundinamarca, el mandatario departamental reafirmó su compromiso con la seguridad de los ciudadanos. Insistió en que se tomarán medidas preventivas para enfrentar esta problemática.
Analizando origen de las amenazas
En la cita se abordó el preocupante tema de las amenazas contra los alcaldes de Villeta, Sasaima, Viotá, La Vega, Cabrera y El Colegio. Según las investigaciones, las intimidaciones provienen de la delincuencia común y no de grupos ilegales.
El gobernador García aseguró que una vez revisados los casos, se establecerá una línea de trabajo para atender esta situación y garantizar la seguridad de los alcaldes y sus municipios.
El general Rodolfo Morales, comandante de la Brigada Trece del Ejército, informó que se han tomado medidas preventivas y brindado acompañamiento a los alcaldes del Gualivá a través del Batallón Miguel Antonio Caro.
Además, afirmó que en Cundinamarca no se ha identificado la presencia de grupos ilegales, sino de delincuencia común que se hace pasar por estos grupos, aprovechándose de los antecedentes históricos de la región.
El comandante de la Policía de Cundinamarca, Edwin Masleider Urrego, se refirió a la situación particular de cada uno de los municipios afectados, destacando que se han realizado reuniones con los alcaldes para evaluar los riesgos y brindarles el apoyo necesario. Hasta el momento, todos los mandatarios se encuentran ejerciendo sus funciones en sus territorios.
La importancia de las consecuencias y la alerta temprana
El delegado de la Defensoría del Pueblo, Regional Cundinamarca, Juan Sebastián García, hizo hincapié en que las acciones realizadas, ya sea por grupos armados, delincuencia común o ciudadanía inconforme, deben tener consecuencias legales puesto que se trata de conductas punibles.
Asimismo, propuso emitir una alerta temprana de carácter preventivo durante la etapa electoral para salvaguardar la integridad de los alcaldes y demás actores políticos.
Finalmente el Gobernador Nicolás García sugirió enviar una circular a los 116 alcaldes del departamento para que actualicen la situación particular de sus territorios desde el Comité de Garantías Electorales. De esta manera, se busca tener un panorama claro de la seguridad en cada municipio y poder adelantar consejos provinciales para estar al tanto de lo que ocurre en cada una de las 15 provincias.
"No hay guerrilla en Cundinamarca"
Los gobernadores de Cundinamarca y Meta, Nicolás García y Juan Guillermo Zuluaga, respectivamente, junto a la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, adelantaron una jornada de ratificación de soberanía en un territorio que les son comunes a las entidades territoriales bajo su gobierno.
Mientras el presidente Gustavo Petro busca materializar su propuesta de "Paz Total" y llevar a cabo negociaciones con los grupos terroristas, los líderes locales han decidido asumir sus propios roles para proteger sus súbditos.
En respuesta a la potencial amenaza, los mandatarios firmes y sin vacilaciones. Acordaron desarrollar un recorrido por los territorios en los cuales las guerrillas y grupos criminales fueron expulsados por las fuerzas del orden. Esta iniciativa buscaba reafirmar la presencia del Estado y garantizar la tranquilidad de la población.
La reacción de los líderes locales fue inmediata y contundente, en respuesta a la aparición de panfletos en los cuales las antiguas guerrillas anunciaban su intención de regresar al Sumapaz.
El pronunciamiento fue de tal proporción que horas después el Ejército hizo replegar a un grupo de subversivos quienes avanzaban por terrenos del departamento del Meta.
Además de los panfletos, informes de inteligencia de las fuerzas armadas y la Policía habían advertido sobre las intenciones de los grupos irregulares. Incluso, se han conocido reportes de reuniones "obligatorias" convocadas por las FARC, lo cual generó rumores sobre el reclutamiento de menores y el cobro de vacunas o "aportes voluntarios".
Los desmovilizados de las FARC en el Meta son los más afectados por estas circunstancias. Sus antiguos compañeros los han presionado para abandonar los terrenos asignados por el Gobierno en el marco de los acuerdos de Paz de La Habana.
Estos desmovilizados se han asentado en zonas de Mesetas, donde han iniciado actividades agropecuarias en busca de reconstruir sus vidas en comunidad, lejos de las armas.
La alcaldesa Claudia López formuló advertencias contundentes a las disidencias de las FARC. Les dejó en claro que el Gobierno y las fuerzas del orden permanecerán en la región para proteger a la población.
