Al fondo de un caño en la localidad Rafael Uribe de Bogotá, fue localizado un cadáver de un hombre.
Un transeúnte que caminaba por el lugar del hallazgo, miró el despojo humano y alerto a la comunidad más cercana, que posteriormente dieron parte a las autoridades.
La humanidad correspondía a las de un hombre de aproximadamente 30 años, que presentó múltiples heridas cortopunzantes.
Al momento del levantamiento del cadáver por parte de funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI), de la Fiscalía General de la Nación, no se hallaron documentos para precisar la identidad del sujeto.
El resto humano fue trasladado a la morgue principal de la ciudad de Bogotá. 
