La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), impuso una medida preventiva de suspensión de actividades por disposición ilegal de escombros en Mosquera, en un operativo de control y seguimiento.
El operativo se llevó a cabo en la zona de ronda del humedal Meandro de Say, ubicado en la vereda San Francisco del municipio de Mosquera.
Este procedimiento se realizó en coordinación con la Policía Nacional y las secretarías de Ambiente y de Gobierno de Mosquera.
Durante el operativo, se descubrió en flagrancia a cuatro personas que estaban realizando una disposición ilícita de materiales dentro del ecosistema del humedal.
Mala disposición de escombros en Mosquera
Entre los materiales había madera, sobrantes de ladrillo, teja plástica, bolsas de cemento, tuberías de PVC, porcelanato, sobrante de concreto, ductos de ventilación y materiales de excavación.
Las volquetas utilizadas para transportar los residuos fueron puestas a disposición de la Policía Nacional para el correspondiente trámite.
Al mismo tiempo, la CAR inició el proceso sancionatorio contra los implicados en estas actividades ilegales.
Carlos Rodríguez, director de la regional Sabana Occidente de la CAR, afirmó que la inadecuada disposición de los residuos ocasiona daños irreparables en los recursos naturales.
Durante este operativo, se pudieron evidenciar afectaciones en el suelo y la cobertura vegetal del área.
Acciones que promueve la CAR
Es importante destacar que estas acciones no solo ponen en riesgo los ecosistemas, sino también a las especies que habitan en ellos.
El humedal Meandro de Say, en particular, alberga diversas especies de fauna y flora, como la tingua azul y el picoamarillo.
Ante esta situación, la CAR hace un llamado a la comunidad en todo el territorio a denunciar cualquier acción que atente contra los recursos naturales.
Para ello, se pueden utilizar los siguientes números de teléfono: (601) 580 11 11 en Bogotá, o 01 8000 915 317 - 01 8000 913606 en el resto del país.
Participación ciudadana en Cundinamarca
Es fundamental la participación ciudadana para proteger y preservar el medio ambiente y los ecosistemas que nos rodean.
La disposición adecuada de los residuos de construcción y demolición es un tema de vital importancia para garantizar la sostenibilidad ambiental.
Estos materiales pueden contener sustancias tóxicas o contaminantes que, si no se manejan adecuadamente, pueden afectar la calidad del suelo, agua, aire, la salud de las personas y la biodiversidad.
La problemática de la disposición inadecuada de escombros y residuos de construcción y demolición no es exclusiva de este humedal en particular, sino que se presenta en diversos lugares del país.
La falta de conciencia ambiental y de normas claras sobre el manejo de estos materiales contribuye a agravar esta problemática.
Una legislación clara y efectiva
Por esta razón, es fundamental contar con una legislación clara y efectiva que regule la disposición de los escombros y residuos de construcción y demolición.
Además, es importante que las autoridades competentes realicen operativos de control y seguimiento de manera periódica para prevenir y sancionar las actividades ilícitas relacionadas con esta problemática.
Asimismo, es fundamental promover la educación ambiental y concientizar a la población sobre la importancia de gestionar adecuadamente los residuos de construcción y demolición.
Separación de materiales reciclables
Esto incluye fomentar la separación de materiales reciclables, promover la reutilización de los que aún pueden tener vida útil.
También, se debe garantizar que los residuos restantes sean llevados a lugares de disposición final autorizados y adecuados.
La gestión adecuada de los residuos de construcción y demolición no solo protege el medio ambiente, sino que también puede generar oportunidades económicas y de empleo con la economía circular.
La reutilización y el reciclaje de estos materiales pueden generar materia prima para la fabricación de nuevos productos y reducir la demanda de recursos naturales.
En este sentido, es necesario promover la investigación y el desarrollo de tecnologías y procesos que permitan una gestión más eficiente y sostenible de los residuos de construcción y demolición.
Esto incluye la implementación de infraestructuras adecuadas para el tratamiento y reciclaje de estos materiales. Igualmente, el fomento de la innovación en el diseño y la construcción de edificaciones que minimicen la generación de residuos y maximicen su valorización.
