Minutos después de que Carolina Galván (progenitora) y Nilson Díaz (pareja de ésta) fueran dejados en libertad este sábado por decisión de una Juez de Conocimiento, la Fiscalía volvió a detenerlos.
Desde el mismo viernes cuando se supo sobre el nuevo episodio a manos de la administradora de justicia que asumió el caso, el ente acusador actualizó los argumentos para volver a detener a los indiciados.
En medio de esos hechos, la Fiscalía insistió en que los argumentos contra Carolina Galván y Nilson Díaz son sólidos, asunto que permite insistir en que la pareja es presunta responsable de la desaparición de Sara Sofía, y debe permanecer tras las rejas.
Alega, entre otras cosas, que los indiciados confesaron ser autores de la desaparición de la niña ocurrida a mediados de enero pasado bajo circunstancias confusas y nada clara para las autoridades.
En su pronunciamiento de las últimas horas la FGN dijo que cuenta con “los elementos probatorios”, con los cuales se probaría la responsabilidad de los dos indiciados en la desaparición de la menor.
Insisten los investigadores que material contundente lo constituye la confesión de madre y padrastro, puntos suficientes para mantenerlos tras las rejas.
La suerte de Sara Sofía es hoy todo un misterio; la Fiscalía trabaja sobre varias hipótesis: una, que la niña fue vendida y, dos, que murió bajo circunstancias sin determinar legalmente.
Incluso la madre y su pareja dijeron que el cadáver de la menor fue arrojada al río Tunjuelito o un caño al sur de Bogotá; las búsquedas no dejaron resultados positivos.
Simultáneamente se supo que pidieron se investigue a la Juez que dejó en libertad a la pareja.
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