El más reciente Comité Departamental de Seguridad de Cundinamarca ha arrojado un balance de seguridad sin precedentes en el territorio. Por primera vez desde el año 2020, cuando se impusieron las restricciones de la pandemia, todas las tipologías de hurtos registraron una reducción significativa en el departamento durante 2025 en comparación con el mismo periodo de 2024.
El análisis detallado fue realizado por el Observatorio de Seguridad de Cundinamarca, una entidad que ha sido reconocida y premiada por la OEA debido a la rigurosidad y precisión de sus cifras.
Cifras que reflejan una tendencia a la baja en Cundinamarca
Los resultados reflejan caídas consistentes en los índices de criminalidad en diversas modalidades delictivas:
- El hurto a personas experimentó una reducción de 2.756 casos.
- Las amenazas disminuyeron en 491 casos.
- El hurto a comercio bajó en 450 casos.
- El hurto a residencias registró 437 casos menos.
- El hurto de motocicletas se redujo en 190 casos.
- El hurto de automotores mostró una baja de 161 casos.
- El abigeato disminuyó en 49 casos.
- La piratería se redujo en 16 casos.
- El hurto a entidades financieras disminuyó en 4 casos.
- La extorsión registró una baja de 3 casos.
Uno de los ejemplos más notables de esta tendencia a la baja se observó en el municipio de Soacha. En este territorio, el hurto a personas pasó de 3.608 denuncias registradas en 2024 a 3.056 en 2025, lo que se traduce en una reducción del 15%, equivalente a 552 casos menos.
El éxito de la "Operación Confianza"
Estos resultados favorables son directamente atribuidos a la estrategia de seguridad denominada “Operación Confianza”, la cual fue lanzada en junio por el gobernador Jorge Emilio Rey Ángel. Esta estrategia se basa en el análisis riguroso del Observatorio para identificar con precisión los patrones de ocurrencia de los delitos, incluyendo horarios y zonas críticas. Ello permitió realizar intervenciones altamente precisas enfocadas en la prevención, la realización de capturas y la atención directa de los factores de inseguridad.
El plan de seguridad fue ejecutado mediante una sólida coordinación interinstitucional, liderada por la Secretaría de Gobierno y Seguridad Ciudadana. La operación contó con el apoyo de más de 1.500 unidades provenientes de diversas fuerzas de seguridad y judiciales, incluyendo la Policía de Cundinamarca, la Región Sabana, Soacha, el Ejército, la Fuerza Aérea y la Fiscalía General de la Nación.