Alias “El Diablo”, “La Flaca” y “El Topo” fueron detenidos como presuntos implicados en la venta de alucinógenos al menudeo. Durante los operativos fueron incautadas sustancias prohibidas.
La justicia local les concedió detención domiciliaria a dos de ellos; la mujer quedó en libertad aunque sigue vinculada al proceso. El balance contra esta clase de delitos fue alcanzado mediante acciones organizadas por la Sijín de Fusagasugá.
Fueron varias semanas de delicados trabajos adelantados por efectivos especializados en esta modalidad de trasgresiones. Adelantaron seguimientos, infiltraciones, interceptaciones electrónicas, revisión de cámaras de seguridad y recolección de información en “fuentes humanas”.
Mediante esas tareas alcanzaron pruebas y pistas que permitieron conocer todos los movimientos del grupo, al igual que la composición de la estructura y el llamado “modus operandi”.
La decisión judicial
Con esos elementos, un Juez local emitió una “orden de registro y allanamiento al lugar que utilizaban estos presuntos delincuentes como residencia y centro de acopio de los estupefacientes”.
Las mismas acciones de la Policía permitieron las detenciones de “El Flaco”, “La Flaca” y “El Topo”. Junto a ellos encontraron 2.200 gramos de marihuana, 70 gramos de “tusi”, 1 gramera y dos celulares utilizados para la venta exprés.
El centro de operaciones y zona de principal influencia del grupo fue ubicado en el barrio Camino Real, sector sur oriental de Fusagasugá.
