*Condenados autores de homicidios en Zipaquirá y Nemocón, Cundinamarca. Los acusados aceptaron las imputaciones formuladas por la Fiscalía; Juez encontró solidez en las pruebas presentadas por el organismo acusador.
El primero de los hechos ocurrió en el barrio Samaria, noroccidente de la conocida Capital Salinera, el 10 de noviembre del año pasado (domingo). Según la sentencia, Juan Sebastián Alvarado Tique atacó y dio muerte con arma blanca a un hombre en plana vía pública.
De otra parte, la misma justicia colombiana ordeno remitir a prisión a Orlando Fonseca Romero a quien halló responsable de otro hecho de sangre. Este se presentó el domingo 17 de ese mismo noviembre, en la vereda Pueblo Nuevo en Nemocón.
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En ambos casos la Policía actuó con celeridad logrando la detención y presentación de los hoy condenados ante las autoridades competentes en sus jurisdicciones.
Condenados autores homicidios
Las pruebas presentadas por la Fiscalía General de la Nación, permitieron que jueces de conocimiento fueran determinantes. Los acusados de los violentos casos, registrados en Zipaquirá y Nemocón, fueron enviados a prisión.
Por ello, dos hombres recibieron condenas debido a su responsabilidad en esos crímenes ocurridos en los municipios de Zipaquirá y Nemocón, en el departamento de Cundinamarca.
Las sentencias fueron dictadas por jueces de conocimiento, luego de que los procesados aceptaran los cargos imputados por la Fiscalía General de la Nación.
En el primero de los casos, Alvarado Tique fue sentenciado a 11 años y 5 meses de prisión por el delito de homicidio, tras aceptar su responsabilidad en el asesinato perpetrado en el barrio Samaria de Zipaquirá. Sucedió el 10 de noviembre de 2024, una vez el autor del homicidio atacó con arma blanca a la víctima en plena vía pública, causándole la muerte en el lugar.
Según los investigadores, el hecho fue producto de una riña; testigos del sector colaboraron en la identificación del agresor, lo cual permitió su pronta captura. La contundencia de las pruebas recolectadas por el ente acusador permitió establecer la autoría del crimen y avanzar en el proceso penal de manera eficaz.
Segundo caso

Por otro lado, en el municipio vecino de Nemocón, Orlando Fonseca Romero fue condenado a 8 años y 8 meses de prisión por homicidio. Lograron comprobar su responsabilidad en el asesinato de un hombre en la vereda Pueblo Nuevo.
Se presentó el caso el 17 de noviembre de 2024 (domingo), cuando la víctima fue atacada en el cuello con un arma cortopunzante. Según las autoridades, el homicida habría tenido una discusión previa con el fallecido, lo que desembocó en la agresión fatal.
Ambos fallos se dieron tras la aceptación de cargos por parte de los acusados, facilitando que los procesos avanzaran por la vía del preacuerdo. Con ello acortaron los tiempos judiciales y garantizaron justicia para las familias afectadas.
Hechos violentos en Cundinamarca
En lo corrido de los últimos meses, el departamento ha registrado varios episodios de violencia generando un clima de cierta preocupación dentro de las autoridades y observadores del centro del país.
Por ejemplo, el pasado 14 de enero de 2025, en Facatativá, un hombre fue condenado a 15 años de prisión por el asesinato de su pareja sentimental. El caso conmocionó a la comunidad local, luego de que se revelara que el agresor había tenido antecedentes por violencia intrafamiliar.
La víctima, emn esa oportunidad, fue atacada dentro de su vivienda y, pese a ser trasladada con vida a un centro asistencial, falleció a causa de la gravedad de las heridas.
De igual manera, en diciembre de 2024, un joven de 22 años fue capturado en Soacha luego de que se le señalara como responsable del homicidio de otro hombre en medio de una riña callejera. Las autoridades indicaron que el hecho se presentó en el barrio Compartir; fue resulto en virtud de las pruebas alcanzadas a través de las cámaras de seguridad y el testimonio de testigos, se logró identificar y detener al presunto autor del crimen.
"Estamos viendo con preocupación cómo los conflictos personales están derivando en situaciones de violencia extrema. Desde la Fiscalía estamos trabajando de forma articulada con la Policía y los entes territoriales para dar respuesta rápida y efectiva", afirmó en su momento la directora seccional de la Fiscalía en Cundinamarca, Luz Marina Morales.
Llamado de atención a la ciudadanía

Ante ese escenario, las autoridades reiteraron el llamado a la ciudadanía a resolver los conflictos por vías pacíficas y a denunciar cualquier hecho violento o sospechoso.
También se ha insistido en la necesidad de fortalecer programas comunitarios de prevención y mediación, especialmente en zonas rurales y sectores urbanos donde se han identificado riesgos de seguridad.
"Los casos de Zipaquirá y Nemocón muestran que la justicia está actuando, pero también revelan la necesidad urgente de avanzar en políticas de prevención. No podemos esperar a que los conflictos escalen a la violencia para actuar", precisó un vocero oficial.
Desde la Gobernación de Cundinamarca anunciaron la implementación de estrategias de seguridad integrales en conjunto con la fuerza pública. Entre ellas, se contemplan patrullajes preventivos, jornadas de pedagogía ciudadana y fortalecimiento del sistema de cámaras de vigilancia en los municipios con mayor índice de homicidios.
Retos de la Justicia
Aunque los recientes fallos judiciales representan avances notorios en la lucha contra la impunidad, organizaciones defensoras de derechos humanos insisten en que aún queda mucho por hacer.
"Las cifras de homicidios no solo deben preocuparnos por su número, sino por las circunstancias que los rodean”, Buenas parte de esos hechos responden a disputas personales, intolerancia, y falta de mecanismos efectivos para la resolución de conflictos, advirtió la Fundación Cundinamarquesa por la Vida.