En Bogotá ha implementado medidas más estrictas para combatir el mal parqueo en las vías principales de la ciudad, afectando especialmente a quienes reinciden en la práctica. Las sanciones han alcanzado a 212 conductores que, al ubicarse de manera irregular en zonas prohibidas, han sido objeto de suspensión de sus licencias de conducción. Esta acción es parte de una estrategia renovada orientada a mejorar el flujo vehicular y preservar el espacio público.
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La administración local respalda estas medidas mediante el fortalecimiento del componente jurídico, facilitando la aplicación de sanciones de forma contundente. Los funcionarios enfatizan que las acciones emprendidas no solo buscan sancionar, sino que también pretenden proteger la integridad de peatones, ciclistas y demás conductores. La política de tolerancia cero para conductores que reinciden se mantiene firme, en línea con los objetivos de seguridad vial del gobierno distrital.
La campaña denominada “En mi casa nos mueve el respeto” se presenta como la estrategia central para contrarrestar estas infracciones. La iniciativa se basa en tres pilares fundamentales:
• Pedagogía
• Control
• Permanencia en el territorio recuperado
Estas directrices han sido diseñadas para fomentar el respeto a las normas de tránsito y para recuperar espacios públicos afectados por el parqueo indebido, contribuyendo así a la mejora del entorno urbano.
Durante el período comprendido entre enero y mayo del presente año, se han llevado a cabo 7.487 operativos orientados a la recuperación del espacio público. Estos operativos han resultado en la imposición de 28.871 órdenes de comparendo y en la inmovilización de 8.122 vehículos, muchos de los cuales se encontraban en condiciones de evidente abandono. La cifra alcanzada refuerza el compromiso del Distrito en abordar de manera directa la problemática.
La focalización de la campaña ha priorizado puntos críticos identificados a través del análisis interno y las solicitudes recibidas por la ciudadanía y alcaldías locales. Entre estos se encuentran:
• Localidades con gran concentración de infracciones, como Kennedy, Chapinero y Usaquén.
• Prioridad en la actuación sobre automóviles, motocicletas y camionetas.
El costo de la sanción impuesta a los conductores infractores asciende a $604.100, monto que se establece para cada penalización por ubicarse en zonas prohibidas de manera reiterada. Las autoridades sostienen que este valor busca disuadir nuevas infracciones y promover el cumplimiento de las normas.
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