El caso sigue sin resolver. Ese martes 28 de junio regresaba de Bogotá cuando fue plagiado metros abajo del Alto de Rosas. Aunque no lo han confirmado oficialmente, el crimen es atribuido a las Farc.
*Alianza Informativa Periodismo Público – Noticias Día a Día
Cárdenas Vélez, quien era reconocido por su carácter, severidad y alto grado de responsabilidad, ese fatídico día quiso ayudar a solucionar lo que se mostraba como un problema de tránsito.
Según la misma versión, parecía que estaba ocurriendo un asalto a un carro de valores, pero que de esa circunstancia no se habían percatado bien quienes circulaban en ambos sentidos.
- Le puede interesar: ¡Nevó en el Páramo del Sumapaz!
Lo cierto es que Manolo, como lo reconocían cariñosamente sus allegados y paisanos, se acercó a un grupo vestidos de militares quienes se hallaban en el punto. Cuando se les identificó le respondieron con golpe de fusil en la cabeza y diferentes partes del cuerpo. Comenzó una salvaje jornada de torturas y suplicios.
Macabro hallazgo
Tres días después (1 de julio de 1.994) un campesino encontró el cadáver del joven mandatario a un lado de un camino de la vereda El Peñón, metros adelante del peaje de San Miguel. Es una ruta hacia Páramo del Sumapaz por Sibaté. Tenía una cuerda delgada atada el cuello, con la cual sus torturadores le aumentaban el suplicio para obligarlo a caminar por donde ellos querían. Presentaba 5 mortales impactos con arma de fuego que acabaron con su vida horas después de su plagio.
Como de momento no se conoce versión alguna desde el sector oficial, menos de la Fiscalía que por entonces iniciaba gestión, (fue creada con la constitución de 91), se manejan varias hipótesis. Una, que se trató de un caso fortuito; de un asalto a un carro de valores de la empresa Atlas. Que los bandidos se llevaron $190 millones.
Otra teoría dice que se trató de una retaliación de las Farc, en venganza por gestiones suyas en la instalación del Ejército y la Policía en Fusagasugá.
Precisamente, el día de su sacrificio regresaba de Bogotá tras recibir condecoración a manos de las fuerzas militares por la gestión en referencia.
Dolientes aún esperan explicación
Por los días del crimen, la Fiscalía y otras autoridades emprendieron los procedimientos de rigor. Se mostraron acuciosos en la búsqueda de la verdad y en la persecución de los responsables del sangriento suceso.
- Interesante: Cundinamarca: El Regio Tram conectará a Facatativá, Madrid, Funza y Mosquera con Bogotá
Adelantaron las primeras pesquisas pero el fragor inicial duró muy poco. A lo largo de las semanas y meses siguientes, la familia solo recibió informes poco alentadores sobre la búsqueda de los autores materiales e intelectuales del crimen. Hasta cuando dejaron de responer. Ni siquiera por cortesía.
Una década después su familia trató de comunicarse con las Fiscalía. Ni siquiera un “acuse de recibo” a vuelta de correo. Tenían esperanza que con los Acuerdos de Paz, o las gestiones de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), pudiera aclarase algo; pero nada.
El de Manuel Humberto Cárdenas, hoy, sigue siendo un crimen impune. Una cuenta pendiente con la familia del inmolado mandatario. Y con toda Fusagasugá y el país.
