Policía y la Fiscalía los persiguió hasta cuando finalmente pudieron enviarlos a prisión. “Los Plataneros” se dedicaban al hurto, asalto y robo de motocicletas en varios municipios del Alto Magdalena.
Alias “Diablo”, “Wicho” y “El Oso” se movían con sigilo y, aunque la Sijín y Fiscalía sabía de sus andanzas, no habían podido recaudar las pruebas que justificaran su detención y presentación ante la justicia colombiana.
Luego de varios meses de paciente trabajo, agentes especiales acopiaron las pruebas que finalmente argumentó la expedición de una orden judicial, que incluyó allanamientos en Ricaurte, Cundinamarca, en donde se materializó las detenciones.
El grupo “se dedicaba al hurto de motocicletas y el hurto a personas teniendo como injerencia en el campo delictivo especialmente en los municipios de Girardot, Ricaurte, Nilo y los alrededores”.
Tras los procedimientos de rigor los tres presuntos delincuentes fueron enviados a la cárcel mediante decisión del Juez que atendió el caso.