La CAR Cundinamarca promueve el ahorro del agua por la inminente llegada del Fenómeno de El Niño al país.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM), certifica la presencia del fenómeno de El Niño en el tejido climático colombiano.
Por ello, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) se erige como bastión comprometido, instando de manera aún más enérgica a la población a adoptar medidas proactivas de ahorro de agua.
Además, la corporación pide a la comunidad tomar medidas e implementar estrategias específicas para la prevención de incendios forestales.
El fenómeno de El Niño, asociado al calentamiento de la superficie del océano Pacífico, se revela como un actor determinante en las alteraciones climáticas a nivel global.
CAR Cundinamarca llama al ahorro del agua
Así quedó establecido en las afirmaciones autorizadas de Josué Vela Medida, responsable de la Red de Monitoreo Hidrometeorológico de la CAR.
Este organismo ha corroborado la disminución moderada en las precipitaciones a través de las estaciones de su red hidrometeorológica.
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De esta forma, señala las perturbaciones en los patrones de lluvia y temperatura con un potencial impacto significativo en la jurisdicción bajo su resguardo.
La presencia de El Niño, cabe resaltar, no implica una interrupción abrupta de las lluvias, sino que introduce variaciones en relación con el comportamiento histórico.
Aunque, hasta el momento, no se vislumbra una perspectiva de desabastecimiento de agua en la jurisdicción de la CAR.
Esto, gracias a las condiciones favorables de almacenamiento hídrico en los embalses operados por la Corporación y otras entidades.
Sin embargo, el llamado a la ciudadanía se enfatiza en actuar con responsabilidad y cautela en el uso de este importante recurso vital.
En una evaluación detallada de la vulnerabilidad en la región, la CAR identifica con precisión los municipios expuestos a un periodo de sequía.
Se destaca especialmente la provincia del Tequendama, Alto Magdalena y aquellos situados en la cuenca baja del río Bogotá.
Con el propósito de ofrecer una guía práctica y concreta, la CAR formula una serie de recomendaciones destinadas a hacer frente a los desafíos asociados al
Fenómeno de El Niño
En el ámbito del ahorro de agua, se promueve la instalación de productos ahorradores, la adopción de baños más cortos, el cierre de la llave durante el enjabonado.
Igualmente se pide tener preferencia por regaderas de mano, destacando su capacidad para significar un ahorro notable de agua en cada uso.
Además, se aconseja no utilizar el sanitario como depósito de residuos, lavar los platos de inmediato para evitar restos pegajosos.
También se pide programar el riego del jardín en horarios específicos para maximizar la absorción de la humedad por parte de las plantas, reduciendo así la evaporación.
La pronta reparación de cualquier fuga interna en los hogares se destaca como una medida preventiva de suma importancia.
En el ámbito del ahorro de energía, la CAR extiende su orientación más allá del uso eficiente del agua e insta a la población a evitar el encendido innecesario de electrodomésticos.
También se recomienda desconectar aparatos en "stand-by", optar por bombillas de bajo consumo, y cerrar la llave del gas por la noche o durante períodos de ausencia.
La elección de electrodomésticos eficientes y adecuados a las necesidades específicas se resalta como una práctica esencial.
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Efectos del Fenómeno de El Niño
En un mensaje contundente, la CAR recalca la importancia de que la población se mantenga informada y consciente sobre los efectos del Fenómeno de El Niño.
Luis Fernando Sanabria, director de la CAR, subraya la relevancia de la educación ambiental y la conciencia como elementos cruciales en la mitigación de los impactos de este fenómeno climático.
En este contexto, la CAR hace un llamado urgente a los organismos municipales para activar medidas preventivas en colaboración estrecha con las comunidades.
Se busca que dicha colaboración, no solo sea enfocada en el ahorro de agua, sino también anticipándose a la probabilidad de impactos derivados del Fenómeno de El Niño.
Destaca así la necesidad de una acción coordinada y sostenida para afrontar los desafíos ambientales.
En síntesis, la CAR se erige como un faro de conciencia y acción ambiental, liderando el camino hacia un enfrentamiento efectivo de los desafíos impuestos por El Niño, llamando a la colaboración activa de la sociedad en esta tarea crucial para la preservación del entorno y la sostenibilidad del hábitat humano.
