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Bogotá: Recompensa de 20 millones por información sobre asaltantes en los cerros orientales

por: Nicolas Hurtado

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La Policía Metropolitana de Bogotá ha anunciado una recompensa de 20 millones de pesos, con la finalidad de capturar a los responsables de los actos delictivos en contra de un grupo de personas, entre los que se encontraban el actor Juan Pablo Raba y el empresarios Carlos Ríos, durante actividades de senderismo en los cerros orientales de la capital del país.

Recompensa por información sobre el paradero de asaltantes

Este anuncio se produce tras una serie de eventos que han alarmado a la comunidad. Los cerros orientales, un lugar apreciado por los entusiastas de actividades al aire libre, se han visto manchados por la sombra de la inseguridad, tal como lo vivieron las víctimas de estos hechos.

Los testimonios indican la presencia de dos individuos de rasgos distintivos: uno de piel trigueña con cabello corto y otro, que portaba gorra en el momento de los hechos, de piel oscura y labios gruesos. Según las descripciones ofrecidas, se presume que estos agresores son de origen venezolano.

El relato de Juan Pablo Raba, compartido en sus plataformas digitales, ilustra la tensión del momento que vivió junto a sus hijos en uno de los senderos.

La confrontación con los asaltantes desembocó en un enfrentamiento físico, donde Raba protegió a su familia a costa de recibir golpes en su rostro. A pesar de la violencia del evento, las heridas sufridas no pasaron de ser superficiales y ningún otro miembro de su familia resultó lastimado.

La situación de Carlos Ríos, en cambio, presentó un matiz aún más dramático. En lo que parecía ser un día típico de ejercicio en el cerro de Las Moyas, Ríos se vio envuelto en una situación de retención por parte de un grupo de nueve hombres armados.

A pesar de la falta de objetos de valor, los asaltantes optaron por retenerlo con la intención de obtener información financiera.

Detalles del rescate de Ríos revelan un esfuerzo coordinado entre el cuerpo policial y los bomberos de Bogotá, que culminó con éxito tras 6 horas de angustia.

La destreza y valentía del empresario para aprovechar un instante de descuido de sus captores fue crucial para su escape y posterior localización por los equipos de emergencia. Más allá del susto y el efecto psicológico, Ríos no sufrió lesiones graves.

Dado el creciente interés y la necesidad de acción ante estos actos que desafían la seguridad de los ciudadanos, la policía insta a la colaboración de la comunidad.

Con el retrato hablado distribuido y la recompensa pública, hay un llamamiento a la conciencia colectiva para identificar y detener a los responsables de estos delitos. Se garantiza absoluta confidencialidad y protección para quienes puedan ayudar en esta causa.