Suscribirse
Logo noticias dia a dia
×
logoFB logoTT logoIG logoTW logoLI logoYT

Hablando de otras cosas

por: Omar Gamboa

hablando-de-otras-cosas
Bajos precios del café, panela, arroz y leche, entre otros, arruinan a los agricultores   Opinión Por: Octavio Quintero Director RED-GES/El Satélite Los continuos debates políticos llenos de artimañas jurídicas y mañas politiqueras ponen al país de espaldas a la población más vulnerable que sufre la debacle en otros ámbitos de la economía real y los servicios públicos como la salud y el sector agropecuario, por poner solo un par de ejemplos. La crisis del sistema de salud es pan de cada día. Es inaudito que no haya autoridad capaz de meter en cintura a las EPS, responsables directas de la quiebra de hospitales y clínicas y, por ende, del calvario que transitan los pacientes en busca de diagnósticos, recetas y medicamentos. Otro tipo de ‘pacientes’ son los campesinos que cargan con la indolencia de un gobierno, éste y los anteriores, y tal vez el posterior, que alegremente se dan ‘garra’ con sus homólogos de países desarrollados firmando TLC que destruyen el agro nacional y dispersan las familias rurales buscando qué más hacer para sobrevivir. El símbolo cafetero Otrora era el símbolo cafetero, las fincas y sus familias. Qué lejanos parecen esos días al ver la realidad de hoy. El dirigente de Dignidad Agropecuaria, Óscar Gutiérrez, denunció la crítica situación que atraviesan los productores de café, arroz, leche, palma y panela, entre otros, dado que el menguante gobierno de Santos se limitó a “promesas que nunca cumplió. Se va debiendo una vela a los más vulnerables grupos del sector de la producción agropecuaria nacional”. El dirigente insistió en la necesidad de volver al viejo fondo de estabilización de precios del café… “Si no se da, la situación de los cafeteros se va agravar, pues, los oligopolios que manejan la comercialización internacional del grano, lo único que buscan es incrementar sus propios ingresos”. Paños de agua tibia Gutiérrez considera un paño de agua tibia los llamados cafés especiales. No son la solución, dice, para aliviar la crisis que afecta a 500.000 familias, pues, de los 13 millones de sacos que se producen anualmente, solo un poco más del millón son especiales. Eso quiere decir que a la mayoría de los productores no los arropa los beneficios que otorgan los cafés especiales. Y la paradoja que se encierra en este programa es que mientras más cafés especiales haya, menos termina valiendo el café especial, y ligado a ello se encuentra el hecho de que los precios cuando suben o bajan, arrastran consigo a todas las calidades del café”. Importaciones de ruina El dirigente gremial también se refirió al sector panelero, abocado en estos momentos a precios de ruina por las masivas importaciones de azúcar y derivados del maíz que se agrava, debido a que hay productores de caña de azúcar , sobre todo en el Valle del Cauca, que producen panela a bajos precios , afectando a los productores tradicionales quienes no pueden competir con ellos. “Si esta situación no mejora, desaparecerán los trapiches tradicionales y la industria quedará en manos de grandes productores, afectando a todos los tradicionales paneleros. Según datos de ASOCAÑA, en cuanto al consumo nacional aparente, es decir, las ventas de los ingenios colombianos, más las importaciones, que en el año 2017 llegaron a 200 mil toneladas en el marco de los TLC firmados, se estima que el consumo llegue a un millón 650.000 toneladas. En el mismo año pasado, la producción de azúcar nacional se proyectó en 2 millones, 200.000 toneladas. Es decir, anualmente están sobrando unas 800 mil toneladas de azúcar y 300 mil de panela, las cuales hay que conseguirles mercado en el exterior. También pesa en la crisis el hecho denunciado por el presidente de ASOCAÑA sobre las importaciones de Bioetanol de maíz provenientes de Estados Unidos, ya que el año pasado a partir del 1° de mayo, el país dio vía libre a dichas importaciones sin ningún tipo de control, las cuales alcanzaron 85 millones de litros. Adicionalmente, la violación a la ley 40 de 1990, que prohíbe tanto que los ingenios produzcan panela con mieles de ingenio, como que se derrita azúcar, o que se construyan megatrapichez tipo Biobando… Y, lo peor, la falta de una política estatal que defienda, estimule y promocione el consumo y la producción de este importante renglón de la economía nacional, son las causas de la ruina del sector, todas con la permisividad de las autoridades nacionales. A finales de 2016 y principios de 2017, se presentaron precios hasta de $4.500 pesos por kilo de panela, pero no fue el resultado de alguna medida gubernamental, sino la acumulación de una larga crisis por falta de acciones del gobierno, puesto que había sacado del negocio a muchos productores generando una escasez momentánea. Hoy la crisis se agudiza; el costo de producción con todos los componentes pasa de $3.000, en promedio a nivel nacional, y el kilo se está vendiendo nuevamente a $1.400, en promedio. Cifras del Ministerio de Agricultura muestran que la panela es la segunda actividad agroindustrial rural después del café: 70 mil unidades agrícolas, 19 mil trapiches y 240 mil hectáreas, representa el 7 por ciento del PIB agrícola. La cadena del dulce, panela, azúcar y bioetanol, generan unos 2 millones 50.000 empleos directos e indirectos; unos 50 millones de jornales al año que están distribuidos en 27 departamentos y 350 municipios, donde el 88% de los paneleros tiene menos de 5 hectáreas. Esa es la situación que no se ve porque todos estamos enfrascados en ver si fue inmoral o pedagógico el culo de Mockus; o si es justicia o injusticia la incriminación de la Corte Suprema al expresidente Uribe. Hace 16 años el país gira alrededor de Uribe y de Santos, y en los próximos 4, agréguele a Duque…Y el mundo sigue su marcha. *Encuentre y reciba más información de Cundinamarca uniéndose al fan page:  https://goo.gl/13uuPz *Espacio publicitario