Por: Alejandro
Desde hace 4 días, un incendio consume hectáreas de una importante reserva forestal en la vereda Chipautá, ubicada en límites de los municipios de Guaduas, Quebradanegra y Villeta. Los esfuerzos realizados por el equipo de bomberos y organismos de la región, no dieron abasto para apaciguar las llamas, por eso hacen un llamado a las autoridades Nacionales para que refuercen su labor.
Hasta el momento el incendio ha consumido 200 hectáreas en el sector de la vereda Chipautá, sitio que constituye una de las reservas forestales más grandes de la región, donde además nace el río San Francisco, que abastece al acueducto municipal.
Los esfuerzos por apagar las llamas de bomberos de Guaduas, Útica y Quebradanegra, la policía, la defensa civil, dos brigadas de la CAR de Útica y Facatativá, y la comunidad en general, resultado infructuosos debido a los fuertes vientos de agosto y el difícil acceso al terreno.
Mientras los habitantes del municipio y organismo de control locales, miran con impotencia como las llamas consumen la vegetación, las autoridades Nacionales no se han pronunciado al respecto, ya que según expertos el incendio solo puede ser apagado con chorros de agua desde el aire, ya que el acceso por tierra es prácticamente imposible.