Por: Omar Gamboa
En uno de los más severos golpes del Ejército contra el terrorismo, producto de importantes tareas de inteligencia, efectivos militares destruyeron petardos que iban a ser utilizados por grupos al margen de la ley.
Las acciones fueron adelantadas por la Fuerza de Tareas Conjuntas Omega en misión ejecutada conjuntamente con la Policía Nacional y otros organismos de seguridad del Estado.
El material, tres toneladas de explosivos de alto poder destructivo, se encontraba escondido en un punto estratégico ubicado entre los departamentos del Meta y Guaviare, en inmediaciones del río Guayabero.
Según las informaciones en poder de agentes especiales, la pólvora iba a ser utilizada, principalmente, en la elaboración minas antipersonas, tatucos y otros artefactos frecuentemente utilizados por el terrorismo.
Los mismos datos precisan que el peligroso material pertenecía a las “disidencias comandadas por alias Gentil Duarte”.

Explosivos incautados por el Ejército en zona del río Guayabero entre el Meta y Guaviare