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Opinión
Por: Bernabé Gámez Hernández
“Qué bonito es proyectar las obras, pero es más bonito inaugurarlas”: Nicolás García Bustos. En el sector de Belmira será construido el Hospital Regional.
Una alianza público-privada tendrá el manejo integral del macro proyecto hospitalario. Sectores sociales expresan enorme satisfacción y confían en que la obra traerá un extraordinario beneficio para miles de personas del centro del país.
Qué difícil es encontrar en el mundo político una promesa hecha en campaña convertida en realidad en tan solo algunos meses en el ejercicio de sus funciones como gobernante.
Ocurrió en octubre pasado, cuando parado en una cancha de microfútbol en el sector de Manila, el candidato Nicolás García cerró una tanda de discursos con un emocionante anuncio: “en mi gobierno será construido el Hospital Regional de cuarto nivel para Fusagasugá” y los casi 2000 asistentes a ese encuentro estallaron en júbilo y alegría, parecía como una premonición que sí se iba a cumplir.
En una seguidilla de intervenciones en dicho lugar, Pedro Cárdenas Vélez, Andrés Arias Quintana, Betto Cardona y Alfredo Molina Triana fueron contundentes para exigirle al seguro candidato ganador de la gobernación el cumplimiento de esta promesa que se había convertido en una necesidad urgente de las familias de esta región colombiana.
El joven Nicolás García la tomo en serio y le garantizó a sus amigos y al selecto auditorio el cumplimiento seguro de este compromiso, entonces, una vez celebraron el triunfo del joven gobernador comenzaron a darle cuerpo al proyecto y el mandatario en su primera visita oficial a Fusagasugá anunció la inminente posibilidad de convertir en una realidad tangible el proyecto que había sido discutido en diversas campañas políticas para la salud pública en territorio fusagasugueño.
Todo quedo cristalizado cuando el gobernador presento a consideración de la Asamblea de Cundinamarca el proyecto de ordenanza para construir en Fusagasugá un Hospital Regional de cuarto nivel.
Los diputados Cárdenas Vélez, Cruz García y Tamayo Tamayo, empujaron la iniciativa y hace pocos días la convirtieron en ordenanza y desde luego autorizaron al mandatario regional para construir la obra.
Nicolás García Bustos, para el efecto convocó al alcalde John Jairo Hortúa Villalba para que aportara los terrenos para la construcción de la obra proclamada que ofrecerá los servicios hospitalarios indispensables a los usuarios ubicados en esta parte del territorio nacional.
Tarea muy difícil para el alcalde si se tienen en cuenta las enormes dificultades topográficas de la ciudad para el desarrollo de proyectos urbanísticos de gran envergadura.
Dentro de las posibilidades se consideró el sector de Santa María en la vía panamericana, doble calzada hacia Jaibana y Chinauta y el terreno donde se encuentra ubicado el centro de atención al adulto mayor Belmira de propiedad de la Beneficencia de Cundinamarca, ubicado en la vía hacia la Pampa.
Por razones de tiempo y lugar fue seleccionado Belmira, que seguramente en un par de años será el centro de la salud pública más importante de esta región.
Además se encuentra incluido en el plan de desarrollo de Cundinamarca y se constituye en una obra bandera del gobierno departamental.
Y COMO VA A FUNCIONAR?
Está plenamente demostrado que gobernar no es tarea fácil, el carácter, la voluntad y la decisión son factores determinantes para no mamarle gallo a los electores.
¿Hoy cuantos lo hacen y porque lo hacen? Este joven gobernador no mintió, jamás lo hizo porque junto conmigo había otros periodistas siguiéndole la pista a la noticia y don Nicolás se ganó todos los honores con un merecimiento enorme como hombre público y de grandes decisiones.
Pero además Molina, Cárdenas, Arias y Cardona, se la jugaron toda y no se equivocaron, encontraron una respuesta positiva gracias a su excelente amistad con el gobernador que hoy alcanza altos niveles de popularidad para convertirse en el mejor de Colombia por las poderosas razones que ha mostrado en este tormentoso año de la pandemia mundial.
Como columnista del periodismo nacional no he utilizado la pluma para acariciarle la solapa y engrandecer a quienes se apartan de la dignidad y la grandeza pero don Nicolás se ha ganado un espacio por sus aciertos cuando es necesario adoptar posturas de altísima responsabilidad en asuntos de profundo contenido social.
ALIANZA PÚBLICO PRIVADA
Se estima que el costo aproximado de la obra es 200 mil millones de pesos. Para el efecto, el gobierno de Cundinamarca se acogerá a una alianza público-privada para ejecutar el proyecto.
La gobernación aportara el 51% del presupuesto destinado para tal fin y el 49% restante del aporte será invertido por la empresa privada.
Expertos en el ramo de la construcción consideran que el costo de la edificación estaría alrededor de los 100 millones de pesos y los 100 millones restantes se invertirían en la dotación con la más alta tecnología y avances científicos que actualmente son utilizados en centros de atención de la salud pública en América Latina.
La Sociedad fusagasugueña se encuentra con una especial motivación y le pide al gobernador que doña Leonor Serrano de Camargo asesore el proyecto con el propósito de ahorrar tiempo, costos y garantizar la calidad de la obra.
Por las múltiples ventajas que ofrece del terreno, se calcula que en dos años estará terminada dicha institución de salud en la ciudad de Fusagasugá.
Don Nicolás García así se gobierna y el manejo de los asuntos públicos lo llevaran a convertirse en el mejor gobernante regional del país.
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Sobre este lote será construido el Hospital Regional del Sumapaz de acuerdo a la propuesta del gobernador de Cundinamarca, Nicolás García Bustos.[/caption] 
