Partió repentinamente este lunes (17 de enero) en su residencia al norte de Bogotá
Zalatiel Barrero Farfán, alcalde electo de su ciudad natal entre 1.992 y 1994, dejó importante huella por su condición humana y social como profesional y hombre público.
Tras graduarse bachiller en el Colegio Rosario de Bogotá y abogado en la Universidad Gran Colombia, comenzó larga trayectoria en diferentes posiciones.
Su historia de servicio comenzó en la Secretaría de Educación de Cundinamarca entre los años 60 y 70. Allí ocupó el cargo de Auditor Fiscal, desde donde amparó jóvenes escolares asignándoles becas
Posteriormente fue llamado como Jefe de Personal de la entonces Caja Nacional de Previsión, -CAJANAL-. Su desempeño le entregó diferentes responsabilidades en la misma entidad a lo largo de 18 años.
Mandatario electo
Poco después y por requerimiento de amigos y buena parte de la población, aceptó presentar su nombre en las elecciones que lo llevó al cargo más importante de Villapinzón.
Desde allí impulsó proyectos que le validaron reconocimientos a nivel nacional. Fue exaltado como Alcalde Ecológico y Cultural del país.
Ese par de años el municipio adquirió 750 hectáreas de páramo de importancia estratégica ambiental. Gracias a su gestión fueron sembrados cerca de 530 mil árboles nativos, un proceso con muy poco antecedentes en la historia nacional.
Zalatiel Barrero también institucionalizó los hoy recordados “Conciertos Mensuales”; esas jornadas facilitaron la presentación de los mejores grupos musicales colombianos.
Como mandatario creó la Oficina de Cultura; implementó las clases de música, danza, teatro y los reconocidos “Sábados Campesinos”. Otra obra con su impronta lo constituye la destacada presentación de la banda municipal en el concurso nacional desarrollado en Paipa, Boyacá.
El deporte es igualmente testigo de su paso por la Alcaldía. A él se le debe la Villa Olímpica.
Zalatiel Barrero Farfán había nacido el 18 de febrero de 1937 
