En un esfuerzo por avanzar en la Reforma Agraria y cumplir con los compromisos del Acuerdo de Paz, el presidente Gustavo Petro anunció este jueves que el Gobierno Nacional se dispone a comprar tierras fértiles pero no utilizadas, valoradas a precio comercial.
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Durante su intervención en el Congreso del Sistema Nacional de Reforma Agraria, celebrado en Bogotá, el mandatario aclaró que la medida excluye terrenos ya productivos, como los destinados a la producción de banano, caña de azúcar y palma africana. “No estamos hablando de los bananeros, no estamos hablando de los cañeros, de los de palma africana, porque allá hay producción y ya usan la tierra para producir”, puntualizó Petro.
El presidente destacó que la iniciativa busca adquirir tierras fértiles actualmente sin uso productivo. "Es la tierra fértil que no está siendo usada para producir", afirmó, y añadió que se llevará a cabo una campaña institucional para comunicar el interés del gobierno en comprarlas. Esta estrategia, explicó, tiene el propósito de motivar a los propietarios de estas tierras a venderlas al Estado.
En su discurso, Petro mencionó específicamente las tierras que han sido heredadas de antiguos terratenientes, cuyos descendientes ya no desean mantener la propiedad ni hacerla productiva. “Esos señores terratenientes, ya con sus años, ven que sus hijos no van a quedarse con su tierra. Entonces hay muchísimos que quisieran 'desenhuesarse', vivir sus últimos años de otra manera y venderla. Y nosotros queremos comprarla", enfatizó.
Para facilitar este proceso, el presidente instó a las entidades competentes a establecer un sistema en línea que permita un control público sobre la compraventa de tierras en Colombia. Este sistema, señaló, debe ser “público, visible, transparente, que donde haya un problema se pueda detectar a tiempo”.
Esta propuesta se alinea con el objetivo de dinamizar el uso de tierras productivas y promover una distribución más equitativa de los recursos agrícolas en el país. "Para eso hay que establecer una comunicación que nos permita ofertas de tierras fértiles, improductivas, en los departamentos de Colombia", concluyó Petro.
Las entidades que forman parte del Sistema Nacional de Reforma Agraria tendrán un papel crucial en la implementación y supervisión de este nuevo sistema de control. La transparencia y accesibilidad de la información serán fundamentales para evitar irregularidades y asegurar el éxito de la iniciativa.
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