La Gobernación de Cundinamarca, a través de la Secretaría de Bienestar Verde y en alianza con la CAR y otras autoridades ambientales, lanzó la campaña #GuardianesDeLaVidaSilvestre para combatir el comercio ilegal de flora y fauna durante las festividades de fin de año. En diciembre y enero, el riesgo de tráfico aumenta debido al flujo turístico, con animales extraídos de sus hábitats para ser vendidos como mascotas o amuletos.
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Sanciones severas y cifras de recuperación
El secretario Diego Leandro Cárdenas Chala advirtió que este delito conlleva graves consecuencias legales: multas de hasta 43.750 SMMLV y penas de prisión de 60 a 135 meses, según la Ley 2111 de 2021. Durante 2024, el Comité Interinstitucional logró recuperar más de 600 animales, entre aves y reptiles, que habían sido extraídos de su entorno natural.
Alerta extendida a la flora silvestre y llamado a la denuncia
Además de la fauna, la alerta se extiende a la flora silvestre, especialmente orquídeas, musgos y líquenes, que son recolectados ilegalmente para decorar pesebres y arreglos navideños, afectando el equilibrio de los bosques y el ciclo hídrico. Las terminales de transporte de Bogotá se han unido a la estrategia para sensibilizar a los viajeros sobre el impacto ecológico de estas prácticas.
Las autoridades instan a la ciudadanía a denunciar cualquier actividad sospechosa a través de la Línea 123 o los números directos de la CAR (316 524 4031) y Parques Nacionales (322 947 1031). "Esta Navidad es una oportunidad para reconciliarnos con la naturaleza y proteger nuestra biodiversidad", concluyó Cárdenas Chala.
