La década pasada observó el ascenso de Gustavo Petro como la figura más influyente de la izquierda colombiana, lo que desafortunadamente también le atrajo antagonistas de ideologías contrarias. El clímax de este enfrentamiento ideológico se produjo durante su campaña presidencial de 2022, donde un complot para asesinarlo fue descubierto y frustrado.
La alarmante revelación de este complot llegó de la mano de Rtvc, el canal estatal, y la revista Raya. Entre los datos relevantes presentados se encuentra la figura de alias 'Calzones', líder del grupo criminal La Cordillera, quien aparentemente planeó un ataque contra Petro durante un evento político en el Eje Cafetero.
A finales de la primavera de 2022, justo antes de la primera ronda de las elecciones presidenciales, la campaña de Petro tuvo que lidiar con múltiples amenazas debido a la popularidad del entonces candidato. El 2 de mayo, se recibió información sobre un posible complot para asesinar a Petro durante su recorrido por el Eje Cafetero. Tras una evaluación cuidadosa y corroboración de la información, Petro decidió errar por el lado de la precaución y cancelar sus eventos políticos en la región.
En esta trama se resalta la figura de César Augusto Giraldo Montoya, conocido como 'Calzones', identificado como el presunto instigador de los planes de asesinato. Giraldo Montoya no es un desconocido en el panorama político, siendo un colaborador activo de las campañas del Centro Democrático.
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Información adicional sobre Giraldo Montoya apunta a que es un empresario local en Pereira, involucrado en la práctica de préstamos 'gota a gota'. Tras una investigación más profunda, se encontró que Giraldo Montoya también era el presunto líder del grupo criminal La Cordillera.
La Fiscalía tiene en su posesión un informe de un agente encubierto, que fue asesinado por la organización criminal, que también señala a 'Calzones' como el líder de la Cordillera.
Finalmente, la campaña de Petro reveló la conexión del grupo criminal La Cordillera con el Clan del Golfo, conocida organización criminal en el Eje Cafetero. Esta conexión apunta a que el complot contra Petro estaría ligado al cierre de su sede de campaña en Montería, Córdoba, debido a amenazas del Clan del Golfo, después de la detención de su líder, Darío Antonio Úsuga David, alias Otoniel.
El descubrimiento de este plan de asesinato subraya los desafíos inherentes a la vida política en el país y la necesidad imperante de proteger la integridad y la seguridad de los líderes políticos, independientemente de su afiliación ideológica.
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