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¡Balazos y pa´río! Es un término desproporcionado comúnmente usado por los antisociales que sin pudor alguno se expresan abiertamente en las redes sociales, casualmente este enunciado se acuña al caso de un hombre que fue reportado como desaparecido en días pasados en el barrio La Paz, de la localidad de Rafael Uribe Uribe en Bogotá.
El cadáver de ese sujeto, de no más de 28 años, fue divisado flotando en las aguas del río Tunjuelito en capital del país. Presentaban varios impactos de bala.
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Tras sacar el resto mortal del cauce lleno de balazos, fue reconocido por los familiares como Michael Andrés Guerrero (28).
Unidades del Cuerpo Oficial de Bomberos arribaron al sitio para sacar del afluente el cadáver y entregarlo a los miembros de criminalística de la Sijín, quienes, tras la labor de inspección, trasladaron a Guerrero en el laboratorio móvil hacia la sede de Medicina Legal.
Se trata de establecer quienes están detrás del crimen y a su vez dar con el paradero de los verdugos.
Otro caso: Navidad de Muerte
Todo parece indicar que el propietario de la vivienda intentaba hacer una reparación y darle retoques a las luces navideñas, cuando de repente recibió la potente descarga.
Al ciudadano identificado como Héctor Armando Hernández de 45 años de edad, alcanzaron a alzarlo en muy mal estado y conducirlo desde esa casa en el barrio Vista Hermosa hasta las instalaciones del Hospital de Meissen, en donde a las pocas horas perdió la batalla contra la muerte en la Unidad de Cuidados Intensivos UCI. 
