Tiene un déficit del 80% del líquido. La Mesa, Apulo, Cachipay, Viotá, Zipacón, Anapoima, El Colegio y Tocaima, centro de Cundinamarca, enfrentan seria amenaza de desabastecimiento del recurso hídrico debido a la fuerte ola de sequía.
El preocupante escenario fue advertido por las autoridades en el departamento, incluyendo a la CAR, luego de adelantar mediciones sobre los niveles de los principales afluentes abastecedores de los acueductos en esos municipios.
Dice la evaluación que “El promedio de lluvias acumuladas del bimestre agosto-septiembre alcanza solo el 25% y el déficit de la oferta hídrica se agrava al superar el 80%, generando conflictos por el acceso a la escasa agua superficial”.
Agrega, en tono preocupante, que el escenario es crítico y que, en virtud de ello, varios municipios se preparan a declarar la alerta roja.
Conforme a los reportes del Centro de Monitoreo Hidrológico y del Clima, de la CAR, “las fuentes hídricas no alcanzan a suplir ni el 30% de la demanda total en la zona”.
Los más preocupante es que las proyecciones apuntan a que las condiciones tienden a empeorar.
Al referirse a los caudales de ríos, quebradas y arroyos dicen los reportes que estos ofrecen caudales “demasiado bajos y la probabilidad de continuar descendiendo es bastante alta, debido a que aún faltan varios días para que concluya la temporada seca”.
Comportamiento de las lluvias:
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Bajas precipitaciones mantienen en riesgo acueductos en la Región del Tequendama, Cundinamarca[/caption]
Para redondear el informe, las autoridades meteorológicas y la CAR insisten en que “las esporádicas lluvias, sectorizadas y de baja intensidad, no han incidido positivamente en la recuperación de las corrientes hídricas”.
“En general, el volumen de agua caída no supera el 20% del aporte normal de la precipitación para el bimestre, lo que indica un déficit del 80%”.
Sobre las condiciones generales, por municipios, el informe indica:
Anolaima: municipio donde su única fuente de abastecimiento es el río Bahamón, la comunidad califica como un caos la situación que se presenta, ya que en las viviendas de más de dos pisos, hace una semana no ha sido posible contar con el líquido. Se prevé generar un acuerdo con los acueductos veredales para captar agua por turnos y alivianar la situación
Viotá: donde el Consejo Municipal de Gestión del Riesgo de Desastres prepara la declaratoria de la alerta roja, la única fuente aún con flujo de agua es el río Calandaima.
Allí las fuentes alternas como el río Lindo, el Ruisito, La Pilama y La Sanjuana llevan varios días completamente secos.
Se estima apaciguar la emergencia consiguiendo el suministro del agua desde Bogotá, adelantándose a la sequía total del Río Calandaima.
Mesitas del Colegio: también declarada en alerta naranja, ha pasado de tener 26 litros por segundo de la Quebrada Santa Martha a tan solo 3 l/s.
El plan de choque allí es lograr que entre las 6 de la mañana y 6 de la tarde, acueductos veredales cierren sus bocatomas, mientras que en el horario contrario, cumpla la misma función el acueducto del municipio.
La Mesa: municipio que se abastece de la Quebrada La Honda de Tena, el caudal bajó de 60 litros por segundo a 20 l/s. siendo necesario racionar el suministro de agua a una vez cada 12 días para el área urbana.
En la zona rural, la cobertura se realiza con carrotanques y camionetas, ya que la presión no es suficiente para cubrir especialmente la parte alta de la población.
Anapoima: también cubierta por la quebrada La Honda, la situación está siendo mitigada a través del Embalse del Club Mesa de Yeguas que, mediante bombeo, está prestando el servicio al casco urbano.
Simulatáneamente Aguas del Tequendama, informó que en convenio con el acueducto “Acuaesperanza”, a diario se obtienen de 40 mil a 60 mil litros en carrotanque, los cuales se distribuyen entre barrios y veredas de las dos poblaciones.
En septiembre concluye la temporada seca en esta zona, sin embargo, solo hasta octubre se esperan precipitaciones importantes y la consolidación de la segunda temporada lluviosa, la cual se extendería hasta la primera mitad de diciembre.
Según predicciones elaboradas por expertos del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales-DEAM, los valores para este periodo (septiembre-noviembre), probablemente estén entre normal y por debajo de lo normal. 
