Por: Alejandro
La calificación fue ratificada por el Ministerio de Transporte al resolver una apelación interpuesta por Cundinamarca, que pretendía ser una especia de máxima entidad en el departamento, razón por la cual se oponía a que se otorgara la cualificación a la citada entidad de la capital salinera. Lo anterior quiere decir igualmente que las oficinas de la Secretaría de Tránsito del departamento tendrán que ser trasladadas para otros municipio, probablemente Cajicá o Chía.
También significa que la Secretaría de Tránsito y Movilidad de Zipaquirá, a manos del abogado Fernando Iván Rodríguez Hernández, podrá ejercer todas las funciones previstas en el Código Nacional de Tránsito al tiempo que alcanzará mayor autonomía en los procesos de control y vigilancia en esta materia.
Igualmente le representa al municipio el recaudo de mayores dineros los cuales irán a programas de prevención y seguridad vial conforme a los planes tanto de la entidad como de la Alcaldía local.
A nivel social, gracias a la interacción con el Simit, los ciudadanos podrán hacer fácilmente diferentes consultas como: estados de cuentas, paz y salvos, y verificación de interacciones de pendientes de pago, ya que la operación de este organismo es nacional y se mantiene activa durante las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Es evidente que cada uno de los beneficios que esta clasificación trae consigo generará un mayor respeto frente a las normas de tránsito, la cultura ciudadana, control a la evasión del pago de multas, el fraude de licencias suspendidas y de los conductores reincidentes.
La clasificación clase A para esa entidad venía siendo buscada desde hace 20 años.