Por: Alejandro
Tanto la Policía Nacional como las demás autoridades y organismos oficiales, entre ellos el Instituto de Bienestar Familiar, ICBF, advirtieron que no cesarán las investigaciones hasta aclarar plenamente lo sucedido con un niño de 2 años quien, parece, fue atacado sexualmente en las últimas horas; de confirmarse el aberrante caso no se detendrán hasta dar con el responsable aseveraron varias fuentes a los medios de comunicación. El menorcito se encuentra siendo atendido en el Hospital San Ignacio de Bogotá, hasta donde fue trasladado desde la mencionada población en donde era cuidado por la familia del novio de su progenitora.
Los primeros seguimientos están siendo adelantados por la Sijín de la Policía del Distrito con sede en Chía; por ahora la comandancia de la Institución en Chía se abstuvo de confirmar o negar que el bebé haya sido objeto de una violación.
Sí indicó, aludiendo las limitaciones de las reservas de ley más tratándose de un caso que involucra a un menor de edad, que la víctima fue internada en el amanecer de este miércoles a un centro de asistencia médica de la población.
De forma airada igualmente reaccionó la directora del ICBF, Cristina Plazas Michelsen: “Lo que se ha hecho con este niño es un crimen atroz e inadmisible. El Instituto ya entró con todo su sistema de protección para iniciar el proceso de restablecimiento de derechos y hoy nos comprometemos con toda la ciudadanía a protegerlo”, dijo.
Reportó que a la fecha han sido denunciados más de 19 mil casos de violencia sexual contra los niños y adolescentes del país, asunto sobre el cual, enfatizó, no será tolerado de ninguna forma.
“Desde el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar vamos a seguir luchando para que no haya beneficio alguno para los violadores de niños y niñas en nuestro país. Hemos alertado que se está abriendo paso a que muchos violadores salgan a la calle y pongan en peligro la vida de nuestros niños”, señaló vehementemente la Directora mientras visitaba el hospital en el cual está siendo atendida la nueva víctima.
Lamentó que la sociedad no haya asumido aún el compromiso de denunciar de manera inmediata y sin contemplaciones estos hechos de violencia sexual que enlutan la vida de cientos de niños colombianos.
En este caso la nueva víctima de abuso sexual, presuntamente en el contexto familiar, estaba a cargo de su mamá, una mujer de 22 años oriunda de Honda, y compartía la vivienda con la pareja sentimental de la señora y varios de sus familiares, entre ellos otro niño de cuatro años, quien también será protegido por el ICBF. De su padre biológico no se sabe nada.
