Decomisaron 47 paquetes de base de coca que pesan, en total, 50 kilos. El cargamento provenía de Florencia, Caquetá, e iba con destino a Bogotá.
El operativo corrió por cuenta de la Policía de Tránsito las últimas horas. Adelantaban trabajos rutinarios de registro y control (kilómetro 52 Girardot – Bogotá), cuando hallaron el matute escondido dentro de un automóvil particular.
Los uniformados entraron en sospecha de que algo no andaba bien. El comportamiento nervioso del par de viajeros los puso en alerta. Fue entonces cuando decidieron profundizar en las requisas hasta encontrar el cargamento.
“Los funcionarios realizan un registro minucioso, encontrando dentro de un compartimiento oculto tipo caleta, 47 paquetes prensados envueltos en papel vinipel”, reportó la Policía.
La requisa
Comentó que el cargamento pesaba, en total, 50 kilos. Era una “sustancia sólida pulverulenta de color beige con características y olor similares a la base de cocaína”.
Ante esa circunstancia los uniformados procedieron con la “captura el flagrancia” de los dos ocupantes del vehículo. Posteriormente y cumplidos los procedimientos de rigor, los detenidos fueron puestos a disposición de Fiscalía. Deberán responder por “tráfico, fabricación o porte de estupefacientes”.
Estrictos controles
Con la entrega de este nuevo resultado contra el delito, la Policía de Tránsito advirtió su compromiso de atacar “el tráfico y la comercialización de estupefacientes”.
Explica que su misión, en este caso, es evitar el paso de sustancias prohibidas hacia Bogotá. Desde allí, la delincuencia abastece el mercado de alucinógenos en el Distrito y poblaciones vecinas en Cundinamarca.
La información sobre el operativo fue resaltado por el teniente coronel, Diego Edixon Mora Muñoz, jefe de la seccional de Tránsito y Transporte en Cundinamarca.
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