El Puesto de Mando Unificado (PMU) del Departamento permanece activo en Silvania, Cundinamarca. Sigue coordinando intensas labores de búsqueda, rescate y asistencia integral tras una emergencia generada por una avenida torrencial y creciente súbita ocurrida la noche del lunes 17 de noviembre.
Balance de la búsqueda y afectaciones humanas
La emergencia impactó principalmente al barrio Kennedy, sector La Esperanza, y zonas aledañas. La quebrada Yayatá inundó 14 viviendas y afectó a 26 familias.
Adicionalmente, la quebrada El Hato arrastró un vehículo con cinco personas a bordo.
Los organismos de búsqueda lograron localizar el cuerpo sin vida de Manuela Sofía Villota, de 16 años, en el río Chocho, sector Pedregal, en Tibacuy. La joven era una de las ocupantes del vehículo arrastrado.
La extracción del cuerpo fue realizada por Bomberos Fusagasugá, Ponalsar, BIADE-80 y la Unidad Departamental de Gestión del Riesgo de Cundinamarca, y fue entregado al CTI.
Las autoridades continúan la búsqueda de Ana Lucía Villota Escandón, de 45 años, y Teresa Escandón, de 65, quienes siguen desaparecidas.
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El 18 de noviembre, se realizó una caracterización de las 26 familias afectadas (75 personas) mediante el formato RUFE (Registro Unifamiliar de Emergencias).
Se reportó la destrucción de tres viviendas, cuatro habitables y siete no habitables. Las familias registradas incluyen personas de todas las edades, desde menores de cinco años hasta adultos mayores.

Respuesta articulada en infraestructura y servicios públicos
Infraestructura y Servicios Públicos:
- EPC (Empresas Públicas de Cundinamarca): Suministró agua mediante carro tanque a los barrios Kennedy y Villa Remtora, evaluó daños en acueducto y alcantarillado, reparó redes de distribución, y actualmente suministra agua a sectores críticos y trabaja en la estabilización de la bocatoma del acueducto municipal.
- ICCU (Instituto de Caminos y Construcciones de Cundinamarca): Inspeccionó las quebradas Yayatá y El Hato, identificó áreas que requieren dragado y construcción de jarillones, habilitó paso en derrumbes de la vereda San José, y brinda apoyo con maquinaria para garantizar la transitabilidad en varios sectores, incluyendo Puente Rojo, El Silencio, La Pradera, Loma Alta, San José y Panamá Alto.
- UAEGRD: Evaluó el estado de cuatro puentes, determinando daños parciales y planificando acciones para asegurar su estabilidad y la seguridad hidráulica de los cauces. También se llevaron a cabo sobrevuelos con dron para identificar posibles represamientos.
Atención integral a personas y animales afectados
Atención a animales: La emergencia también afectó a animales domésticos y de producción. El Instituto de Protección y Bienestar Animal de Cundinamarca (IPYBAC) realizó valoración médica y administración de vitaminas a 17 animales, además de entregar alimentos.
Salud y acompañamiento psicológico: En colaboración con la Secretaría Municipal de Salud y el Hospital Ismael Silva, se prestaron servicios de salud, incluyendo medicina general, control de crecimiento y desarrollo, y acompañamiento psicológico.
Un total de 8 personas (tres niñas, tres mujeres adultas mayores, un hombre de 26 años y una mujer de 31 años) recibieron soporte emocional y estrategias de afrontamiento.
La jornada del 19 de noviembre se centró en continuar la caracterización en las veredas El Hato, Zazipa El Mirador y Loma Alta Central, realizar visitas técnicas a puntos con desprendimientos, y definir actividades con maquinaria para aumentar la capacidad hidráulica de la quebrada Yayatá y proteger estructuras.
El gobernador Jorge Emilio Rey Ángel expresó su profunda solidaridad con las familias afectadas.
Las autoridades reiteran su compromiso con la atención integral, la seguridad de las familias y la recuperación de la infraestructura, mientras la búsqueda de las dos personas desaparecidas continúa "sin descanso".







