*Hallan restos de Ángela María Chizacá, secuestrada en julio del 2023 en Girardot, Cundinamarca. La joven empresaria fue plagiada en momentos que ingresaba al conjunto donde residía tras cumplir sus tareas empresariales.
La fatal noticia fue comunicada por el comandante de la Policía Cundinamarca, coronel Mauricio Arley Herrera Luengas, dando a conocer concluyente reporte de Medicina Legal este viernes (12 de diciembre 2025).
Según dijo, los despojos mortales, encontrados el 3 de julio pasado en zona rural de Rovira, Tolima, sí pertenecen a la empresaria. Los restos óseos permanecían sepultados en un difícil paraje de la vereda La Islandia del mencionado municipio, hasta donde llegaron los efectivos del Gaula quienes tenían en sus manos la investigación.
Precisamente, el 3 diciembre del año pasado fueron detenidos los principales sospechosos del plagio: el golpe fue propinado en zona rural de San Luis, Tolima, en diciembre del año pasado.
Hallan restos de joven secuestrada en Girardot, Cundinamarca

Tras más de dos años de intensa investigación judicial, las autoridades confirmaron que los despojos hallados en zona rural del Tolima corresponden a Ángela María Chisacá. Había sido plagiada en Girardot, Cundinamarca hace dos años: el jueves 13 de julio de 2023.
El dictamen definitivo del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses cerró uno de los casos más sonoros ocurridos el sur de Cundinamarca los años recientes.
La confirmación fue entregada oficialmente este viernes 12 de diciembre de 2025 por el comandante del Departamento de Policía Cundinamarca, coronel Mauricio Arley Herrera Luengas. Explicó que los análisis científicos fueron concluyentes. Ratificaron que los restos exhumados el pasado 3 de julio en la vereda La Islandia, jurisdicción del municipio de Rovira, Tolima, pertenecen a la comerciante de 38 años.
Ángela María Chisacá fue reportada como desaparecida en la madrugada del jueves 13 de julio de 2023, luego de que ingresara al conjunto residencial donde vivía en Girardot. Se aprestaba a descansar tras cumplir con sus actividades empresariales; era propietaria de una cadena de pizzerías en Girardot.
De acuerdo con información recopilada por las autoridades y los testimonios familiares, la mujer fue interceptada en el parqueadero del conjunto por sujetos que, presuntamente, la estaban esperando.
Desde ese momento, no se volvió a tener rastro de ella. Horas después, el hallazgo de su vehículo —un Toyota Corolla rojo, placas GMW 584— completamente incinerado en la vereda Camala, municipio de Flandes, Tolima, reforzó la hipótesis de un secuestro planeado y ejecutado con alto nivel de coordinación criminal.
“Hasta el momento todo es incertidumbre; lo único que sabemos es que ella fue extraída del conjunto y no más. No logramos entender qué pasó con ella”, expresó en su momento la madre de Ángela.
Exigencias millonarias y engaño criminal
Las investigaciones permitieron establecer que, semanas después del secuestro, los delincuentes se comunicaron con los familiares de la víctima a través de mensajería instantánea. Quisieron hacerse pasar como integrantes de disidencias de las FARC. En esos mensajes exigieron sumas millonarias por la supuesta liberación de la empresaria.
Inicialmente, las exigencias habrían alcanzado los $50.000 millones, cifra que luego varió durante el proceso investigativo. En otros informes judiciales se estableció que la banda criminal también manejó exigencias de $5.000 millones y $500 millones de pesos, lo cual evidenció intentos de extorsión progresiva para presionar a la familia.
Según la Policía, los secuestradores, incluso, enviaron pruebas de supervivencia durante los primeros días; con ello, quisieron dar a entender que Ángela María continuara con vida. Sin embargo, con el paso del tiempo, las comunicaciones cesaron y el caso tomó un rumbo aún más doloroso.
Hallazgo en Rovira, Tolima
El coronel Herrera explicó que, gracias al análisis de más de 500 horas de videos de cámaras de seguridad, y entrevistas a más de 20 personas y labores de inteligencia del GAULA, se logró reconstruir la ruta utilizada por los delincuentes tras el secuestro.
Las tareas condujeron el 3 de julio de 2025, a una zona de difícil acceso en la vereda La Islandia, jurisdicción de Rovira, Tolima. Allí, los uniformados realizaron la exhumación de restos óseos que fueron trasladados a Medicina Legal para los análisis forenses correspondientes.
“Fue un trabajo técnico, científico y profundamente humano. Desde 2023 no descansamos un solo día en la búsqueda de la verdad”, señaló el comandante de la Policía de Cundinamarca.
El Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses entregó el dictamen definitivo el 11 de diciembre de 2025. Ratificó, mediante pruebas científicas, que los restos corresponden a Ángela María Chisacá. La noticia fue comunicada a la familia y, posteriormente, a la opinión pública.
Capturados los presuntos responsables
Uno de los avances más importantes del caso se produjo el 3 de diciembre de 2024. Entonces, las autoridades capturaron a tres integrantes de la banda delincuencial conocida como “Los Inquisidores” o “Los Camala”. Fueron señalados como los más posibles los responsables del secuestro, desaparición forzada y homicidio de la comerciante.
En la lista figuraban Carlos Iván C. R., alias “El Gordo”, cabecilla de la organización y desmovilizado del Bloque Tolima de las Autodefensas. También aparecían Ana Mercedes C. y Edison C. G.
De ellos, el primero, es señalado como quien habría ordenado el secuestro y coordinado las exigencias económicas, utilizando la fachada de grupos armados ilegales para intimidar a la familia.
Así mismo y dentro de las mismas tareas investigativas, en Girardot y San Luis, Tolima, las autoridades incautaron armas de fuego, municiones y dispositivos móviles, elementos clave para el trámite judicial.
Proceso legal en curso
Un Fiscal de la Seccional Cundinamarca imputó a los capturados los delitos de secuestro extorsivo agravado, desaparición forzada e incendio. Adicionalmente, alias “El Gordo” fue judicializado por fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego.
Todos los procesados se encuentran con medida de aseguramiento en centro carcelario y, aunque se declararon inocentes, continúan enfrentando el proceso judicial correspondiente.
Las autoridades confirmaron que ya son cinco los responsables privados de la libertad, lo cual representa un golpe contundente contra esta estructura criminal.
Durante su declaración oficial, el coronel Herrera fue enfático en enviar un mensaje claro a los grupos delincuenciales: “Hoy podemos decirle a la comunidad y a la familia que el crimen no quedó en la impunidad. La Policía Nacional tiene las capacidades para encontrarlos”.
El oficial destacó la importancia del trabajo articulado entre la Policía, la Fiscalía y la ciudadanía, cuyos aportes resultaron determinantes para esclarecer el caso.
¿Quién era Ángela María Chisacá?
La joven víctima tenía 38 años; era madre de dos hijas y se desempeñaba como empresaria del sector gastronómico, propietaria de una pizzería en Girardot. Era reconocida por su espíritu emprendedor y su dedicación a la familia.
Su caso se convirtió en símbolo del impacto del secuestro extorsivo en Colombia y de la necesidad de fortalecer la lucha contra las estructuras criminales que operan en distintas regiones del país.
Para las autoridades, el hallazgo de los restos de Ángela María Chisacá marca el cierre de una búsqueda larga y dolorosa, pero también reafirma la importancia de la verdad judicial. Consideran que aunque nada devuelve la vida perdida, la confirmación de los hechos permite a la familia iniciar un proceso de duelo con respuestas claras y la certeza de que los responsables están siendo juzgados.







