El director de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca – CAR, Alfred Ignacio Ballesteros, resaltó recientemente la importancia de que las empresas de servicios públicos asuman un papel activo en la promoción de la seguridad hídrica y energética del país. Durante su participación en el 27° Congreso de la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Públicos y Comunicaciones de Colombia – Andesco, celebrado en Cartagena, el funcionario destacó la necesidad de implementar acciones coordinadas y orientadas a enfrentar los retos que impone el cambio climático.
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En su intervención, el director Ballesteros abordó las medidas que la CAR ha venido impulsando para garantizar la sostenibilidad de los recursos hídricos. El funcionario explicó que las estrategias están concebidas bajo una hoja de ruta con visión de mediano y largo plazo, en la que se incluyen iniciativas de restauración y conservación ecosistémica. Este enfoque integral cuenta con el aval de estudios técnicos y académicos, como el realizado en colaboración con la Universidad Nacional de Colombia, que evaluó la vulnerabilidad hídrica en la región.
Entre los aspectos destacados de dicho estudio se encuentran datos que reflejan una posible reducción de hasta un 13.8% en la oferta hídrica para finales del siglo en 46 municipios de la cuenca del río Bogotá. Esta estimación se presenta en un contexto en el que, incluso antes de que Bogotá y once municipios de la Sabana adoptaran medidas de racionamiento el año anterior, se vislumbraban escenarios de decrecimiento en la disponibilidad del recurso. Los resultados del estudio se han convertido en un insumo fundamental para la elaboración y ajuste de políticas dirigidas a la gestión sostenible del agua.
La estrategia planteada por la CAR se articula en torno a dos planes fundamentales: el Plan de Gestión Ambiental Regional – PGAR 2024-2035 y el Plan de Acción Cuatrienal – PAC 2024-207. Dentro de estos marcos de acción se incluyen las siguientes áreas de intervención:
• Uso eficiente del agua.
• Mantenimiento adecuado de los embalses.
• Gestión del riesgo.
• Fortalecimiento de la gobernanza territorial.
En un enfoque orientado a resultados, el director Ballesteros insistió en la necesidad de incorporar soluciones basadas en la naturaleza (SbN) y en ordenar el territorio de manera estratégica, especialmente en la Sabana de Bogotá. Asimismo, destacó que la integración de determinantes en los planes de ordenamiento territorial es clave para lograr un equilibrio entre el desarrollo de infraestructura y la protección de los recursos naturales.
El mandatario también enfatizó el papel decisivo de las alianzas interinstitucionales. Según sus declaraciones, coordinar esfuerzos entre autoridades ambientales, entidades territoriales, sectores productivos y, sobre todo, las empresas de servicios públicos, constituye una prioridad para establecer garantías en materia hídrica y energética. Esta invitación abre un espacio para la colaboración multisectorial orientada a la resiliencia frente a los efectos del cambio climático.
La propuesta de la CAR se enmarca en la búsqueda de políticas que fundamente la conservación y el uso racional de los recursos naturales, haciendo énfasis en la relevancia de planes estratégicos que consideren tanto los aspectos ambientales como los sociales y económicos del territorio. El enfoque adoptado por la entidad responde a la exigencia de poner en praxis soluciones que involucren a la comunidad en el manejo de sus ecosistemas estratégicos.
Finalmente, el llamado a la acción dirigido a las empresas de servicios públicos busca consolidar una red de políticas y estrategias que garanticen la seguridad hídrica a lo largo y ancho del país. La experiencia y el enfoque técnico de la CAR resaltan la necesidad de trabajar en conjunto y desde distintas instancias para ofrecer respuestas efectivas a los desafíos ambientales y energéticos que enfrenta la nación.
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