La Gobernación de Cundinamarca ha puesto en marcha un paquete de acciones destinadas a mitigar los efectos ocasionados por el temblor ocurrido el pasado 7 de junio. La gestión regional refuerza su compromiso con las comunidades afectadas y la pronta normalización de los servicios en zonas críticas.
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Las intervenciones se han centrado especialmente en los municipios de Medina y Paratebueno, donde la incidencia del fenómeno natural ha generado deterioros en infraestructuras públicas y riesgos en áreas de alta afluencia social. En este contexto, se destaca la coordinación entre diferentes niveles de gobierno.
Entre las estrategias implementadas se encuentran:
- Despliegue de maquinaria pesada para la remoción de escombros.
- Programas de reubicación de sectores afectados.
- Establecimiento de acuerdos de colaboración con entidades nacionales.
La acción operativa contempla el uso sistemático de camiones, excavadoras y otros equipos de maquinaria amarilla, además de la incorporación de especialistas en geotecnia y pavimentación, orientados a restaurar las vías públicas y espacios afectados en dichos municipios.
Durante un diálogo reciente en Caracol Radio, el gobernador Jorge Rey detalló los planes para asistir a la población damnificada, resaltando la importancia de consolidar la coordinación con los organismos competentes y los recursos necesarios a nivel nacional.
Rey subrayó la relevancia de trabajar en conjunto con entidades como la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, el Ministerio de Vivienda, Saneamiento y Agua Potable, y otras instancias vinculadas, afirmando que:
• Se requiere una inversión firme y colaborativa.
• La sinergia entre sectores es crucial para afrontar los retos actuales.
Las comunicaciones con el Gobierno Nacional refuerzan el despliegue de recursos y el compromiso institucional de optimizar la respuesta ante desastres naturales en la región. Esta sinergia se presenta como un componente esencial en la estrategia de respuesta inmediata.
Adicionalmente, se ha identificado que el municipio de Paratebueno, epicentro del movimiento sísmico, ha visto comprometido el funcionamiento de 17 instituciones educativas. Ante esta situación, se ha dispuesto que las vacaciones sean adelantadas mientras se mitiga la emergencia.
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