En el marco de un acuerdo innovador, la Alcaldía de Soacha y la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) han conformado un memorando que destina más de 5.800 millones de pesos a la protección y revitalización de los humedales del municipio. Esta inversión se destaca por ser la mayor ayuda ambiental en uno de los territorios más densamente poblados de Cundinamarca.
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El convenio establece un plan de acción enfocado en preservar estos espacios naturales que funcionan como pulmón ambiental en medio de la expansión de infraestructuras urbanas y el crecimiento residencial. La administración municipal resalta la relevancia de conservar los humedales, cuyos ecosistemas contribuyen sustancialmente al equilibrio ambiental de la región.
El acuerdo contempla diversas actividades que buscan restaurar y fortalecer la funcionalidad de los humedales. Entre las intervenciones programadas se incluyen las siguientes acciones:
• Limpieza de la franja acuática: eliminación de material vegetal presente en los espejos de agua.
• Limpieza de la franja terrestre: retirada de desechos y vegetación deteriorada.
• Instalación de cerramientos: refuerzo en sectores donde el actual cerramiento ha sido removido o se encuentra dañado.
• Siembra de especies vegetales: reintroducción de flora nativa para la regeneración del hábitat.
• Fomento de la participación comunitaria: integración de la comunidad en el proceso de restauración.
Las zonas seleccionadas para las intervenciones son Neuta, Santa Ana y Tierra Blanca, ubicadas estratégicamente en diferentes puntos del municipio. Estas áreas han sido elegidas considerando su relevancia ambiental y su papel en la mitigación de la presión urbanística.
El comunicado de la Alcaldía destaca que la implementación de estas medidas se enmarca dentro del Plan de Desarrollo municipal, cuya socialización con la comunidad fue realizada previamente. La transparencia en la difusión de información ha sido un pilar en la estrategia de la administración.
El proyecto subraya un compromiso multifacético con la sostenibilidad, integrando acciones remediales y preventivas que benefician tanto al medio ambiente como a la calidad de vida de los habitantes de Soacha y Cundinamarca.
Por otro lado, el convenio pone de relieve la capacidad de coordinación entre entidades gubernamentales y regionales, lo que resulta crucial para lograr la protección de espacios naturales en medio de contextos de alta presión urbanística.
En esta perspectiva, la inversión en la restauración de los humedales se presenta como parte de una administración proactiva, orientada a garantizar un entorno ecológico funcional a través de medidas concretas y la colaboración comunitaria.
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