La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) inauguró en la vereda Andorra del municipio de Jerusalén una estación experimental destinada a la conservación y propagación de especies nativas del bosque seco tropical. La iniciativa, que se enmarca en un proyecto de alto valor científico y ambiental, busca generar un banco genético para fortalecer un ecosistema que se ha visto reducido a tan solo un 8% en el territorio nacional.
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El proyecto cuenta con el respaldo del Instituto Alexander von Humboldt, lo que aporta un sólido soporte en materia de investigación y protocolos científicos. Esta alianza permite no solo la reproducción de árboles y arbustos representativos de este ecosistema, sino también la aplicación de técnicas avanzadas que aseguren su adecuado crecimiento y conservación a largo plazo.
La estación experimental dispone actualmente de más de 1.200 individuos pertenecientes a 23 especies nativas, de los cuales ya se han sembrado 300 ejemplares que han sido reproducidos siguiendo estrictos lineamientos técnicos. Este avance es fruto de un proceso que ha estado en marcha durante años y que se ha beneficiado de numerosas expediciones y de la colaboración interinstitucional.
Entre las acciones emprendidas para consolidar el proyecto se destacan las siguientes:
• Recolección de semillas y plántulas provenientes de 64 expediciones en Cundinamarca.
• Desarrollo de protocolos científicos para la germinación y el crecimiento saludable de las especies.
• Creación de un banco de material vegetal que servirá para futuras labores de restauración ecológica.
Durante la presentación oficial, el director del Laboratorio Ambiental de la CAR, Carlos Emilio Gutiérrez, explicó que la estación se ha diseñado como plataforma para establecer métodos que faciliten la restauración y el enriquecimiento de las coberturas vegetales en la región. Estos protocolos permitirán alcanzar un crecimiento sostenible y la protección de una diversidad biológica amenazada.
El proyecto se enmarca en una estrategia institucional que vela por la integración de la ciencia, la investigación y la restauración ecológica en las políticas ambientales. La metodología aplicada se ha orientado a garantizar la viabilidad y el desarrollo de especies clave para el mantenimiento del ecosistema del bosque seco tropical.
El acto de presentación contó con la participación de delegados de la Procuraduría General de la Nación, el Ejército Nacional y funcionarios de la alcaldía de Jerusalén, quienes colaboraron activamente en la jornada de plantación y en la explicación de los detalles técnicos y científicos del proyecto.
La iniciativa se presenta como un componente más en la estrategia de conservación que aspira a ampliar las áreas restauradas y a recuperar el tejido ecológico diluido en diferentes municipios de la jurisdicción.
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