VIDEO. Las tareas fueron trasladadas a las zonas por donde se encuentra la línea férrea en la capital colombiana. Se trata de la demolición de las edificaciones que desaparecerán con la operación del transporte masivo de pasajeros.
Reportes sobre la novedad fueron entregados por el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García Bustos, al suministrar informe sobre los avances de la ambiciosa obra entre Cundinamarca y Bogotá.
“El viernes pasado comenzaron en Bogotá las obras de demolición de los inmuebles que adquirió la Empresa Férrea de Cundinamarca”, explicó el mandatario. Se trata de edificaciones que necesariamente desaparecerán para abrirle paso a la línea por donde circulará la máquina de transporte masivo.
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Zona de trabajos
Las obras en cuestión fueron ubicadas a la altura de la carrera 40 entre Corferias, Quinta Paredes, Antonio Nariño, la calle 26 y la Avenida Las Américas. En esa zona el espacio de influencia del tren deberá ser ampliado como parte de las disposiciones de seguridad.
El proceso corre por cuenta de la Empresa Férrea Regional S.A.S., y “hacen parte de la recuperación del corredor férreo y la puesta a disposición de este a la Concesionaria Férrea de Occidente (CFRO)”.
Actualmente se cumplen “gestión predial para poner a disposición otros 164 predios requeridos para este proyecto, requisito para el inicio de las obras de Regiotram, programado para abril de 2023”.
Gestiones previas
En septiembre pasado, el modelo real de los vehículos fueron presentados oficialmente por la empresa china encargada del desarrollo de la obra.
Cada tren cuenta con tecnología de última generación y se constituye en uno delos modelos más actualizados en Latinoamérica.
Buena parte del trazado utiliza el corredor férreo de los antiguos ferrocarriles de Colombia. Tiene una longitud de aproximadamente 40 kilómetros entre Facatativá y Bogotá. De ellos, 25 kilómetros estarán ubicados en Cundinamarca, mientras los restantes 15 correrán en el Distrito.
Las máquinas férreas
Según los primeros datos, operarán 18 trenes que movilizarán cerca de 40 millones de pasajeros al año, según estimativos de los promotores del proyecto. Cada máquina se moverá a una velocidad promedio de 70 kilómetros por hora. “Este será el primer sistema de transporte eléctrico y el primer tren de cercanías en el país”.
De acuerdo al modelo presentado hace poco, cada unidad contará con “altos estándares de calidad para garantizar la comodidad de los pasajeros”. Igual, conforme a los argumentos oficiales, “optimizando la movilidad” será elevará la calidad de vida e impulsará la generación de empleo.
Además, cada unidad cuenta con una capacidad de 884 pasajeros en un espacio de 28 metros de extremo a extremo. Fundamentalmente conectará a usuarios de Facatativá, Funza, Madrid y Mosquera con Bogotá.
Trazado en Bogotá
El sistema, según propuesta inicial, se conectará directamente con la línea metro proyectado en Bogotá en terminal ubicado sobre la carrera 17 con calle sexta de la capital colombiana. De ahí parte hacia la calle 20 para conectarse con la línea férrea existente para dirigirse hacia el occidente.
Cruzará la Avenida NQS, las Américas, la carrera 50, la 68, la Avenida Boyacá y la Ciudad de Cali para empatar con la estación en Fontibón. Traspasada la línea entre Bogotá y Cundinamarca se conectará con Funza, Madrid, Mosquera y Facatativá.
Otros proyectos de transporte masivo
La Gobernación de Cundinamarca y las alcaldías de Bogotá y Soacha también se encuentran comprometidas en la ampliación de Transmilenio hacia este último municipio.
En siguiente fase, el sistema se extiende de la calle 22, sector El Altico. Son 1.3 kilómetros del sistema que contará con “dos estaciones de parada sencilla”.
La Fase III del articulado en Soacha se extenderá por 2.6 kilómetros más hasta El Vínculo, punto en el cual operará la terminal hacia el sur. Hasta esa base llegarán buses intermunicipales provenientes del sur de Cundinamarca y el país.
