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Arrojaban cadáveres de víctimas en Tocaima, Viotá y Agua de Dios, Cundinamarca

por: Omar Gamboa

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Torturaban y asesinaban a quienes les incomodaba o se les atravesaban en el negocio de alucinógenos; buscaban dominar plenamente el mercado en el antiguo Bronx y San Bernardo, centro de Bogotá.     Los presuntos protagonistas de esta noticia, cinco hombres (dos de ellos extranjeros) y una mujer, fueron cobijados con medida de aseguramiento a manos de un Juez de Control de Garantías de Bogotá, quien aceptó los argumentos de los fiscales de la seccional Cundinamarca que llevan el caso. Establecieron los investigadores que los indiciados pretendían dominar plenamente el mercado de estupefacientes en amplia zona del corazón de la capital colombiana, para lo cual acudían a diferentes sistemas a fin de eliminar la competencia. “… las indagaciones evidenciaron que los capturados estarían vinculados a 14 asesinatos cuyas víctimas fueron encontradas recientemente en Viotá, Tocaima y Agua de Dios (Cundinamarca)”, precisa un reporte de la Fiscalía. Agentes del organismo investigativo revelaron en las audiencias que la red mantenía como centro de operaciones cinco inmuebles desde donde distribuían marihuana, bazuco y base de coca entre otras sustancias narcóticas. Lo anterior pudieron establecerlo las autoridades mediante importantes y efectivos trabajos de inteligencia que incluyeron seguimientos, registros fílmicos, infiltraciones e interceptaciones telefónicas que permitió las pruebas con las cuales fueron puestos tras las rejas. Conforme a las mismas evaluaciones, las actividades ilegales les dejaban cerca de 30 millones de pesos en utilidades al mes; investigan si se encuentran comprometidos en otros eventos colaterales al margen de la ley. Durante las mismas diligencias de allanamiento fueron incautadas 20 mil dosis de bazuco, marihuana y cocaína, además de celulares y dinero en efectivo. Dentro de los capturados se encuentran H. E. G., de 18 años, quien sería uno de los jíbaros junto a G. A. M. Z.; A. J. T. V., supuesto coordinador de finanzas. S. P. B., presunto encargado de manejar los dineros de la organización; C. J. G., alias "Madre", supuesta coordinadora de finanzas y J. X. R. R. igualmente presunto expendedor. Los hombres fueron remitidos a la Cárcel Nacional Modelo y la mujer al Buen Pastor de Bogotá. Fueron imputados por los cargos de porte, tráfico y fabricación de estupefacientes.