La聽Corporaci贸n Aut贸noma Regional de Cundinamarca (CAR), en un ejercicio de autoridad ambiental para la protecci贸n del suelo, impuso una medida preventiva contundente en el municipio de聽Villapinz贸n. El operativo se llev贸 a cabo en la聽vereda Tibita, donde se detect贸 una explotaci贸n minera que operaba en la absoluta clandestinidad, ya que la corporaci贸n no cuenta con ning煤n expediente o permiso ambiental que avale el ejercicio de la miner铆a en ese predio espec铆fico.
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Infraestructura precaria y da帽o ambiental evidente
Durante la diligencia t茅cnica realizada por la regional de Almeidas y Guatavita, los funcionarios hallaron una infraestructura minera artesanal que inclu铆a un聽inclinado o bocamina. Se observ贸 que las paredes laterales y el techo de la excavaci贸n contaban con un sostenimiento precario en madera. Adem谩s, en el lugar se encontraba operativo un聽malacate impulsado por un motor a combusti贸n de un tractor, herramienta utilizada para la extracci贸n de materiales. Aunque el predio se encuentra en un 谩rea que geogr谩ficamente coincide con zonas de reserva especial para la miner铆a, la CAR fue enf谩tica al aclarar que esta bocamina espec铆fica聽no est谩 inmersa dentro de las minas consideradas como tradicionales, lo que la convierte en una actividad totalmente il铆cita.
Los da帽os ambientales reportados son de gran calado. El director de la regional, Camilo Poveda, explic贸 que se evidenci贸 una inadecuada disposici贸n de est茅riles (residuos de la excavaci贸n), lo cual propicia la p茅rdida y degradaci贸n acelerada del suelo. Esta pr谩ctica compromete la integridad f铆sica del terreno y anula su capacidad productora, impidiendo adem谩s el crecimiento de cualquier tipo de cobertura vegetal en la zona afectada.
Madera ilegal y un llamado a la responsabilidad
Como prueba adicional de las irregularidades, las autoridades hallaron un 谩rea de acopio con 27 piezas de madera rolliza de eucalipto, de las cuales los responsables no pudieron exhibir soporte legal que acreditara su procedencia o permiso de aprovechamiento.
La CAR record贸 que, seg煤n la聽Resoluci贸n 212 de 2016, existen procedimientos establecidos para determinar medidas de compensaci贸n por la p茅rdida de biodiversidad en tr谩mites ambientales. Bajo el lema "La CAR Act煤a", la instituci贸n hizo un llamado a la responsabilidad ciudadana, subrayando que las acciones que se realizan hoy determinar谩n el legado ambiental para las futuras generaciones. Con esta intervenci贸n, se busca no solo sancionar el incumplimiento de la norma, sino frenar de inmediato el deterioro de un ecosistema vital para la regi贸n.
