Sutatausa, un municipio reconocido como la capital de la hilandería en Cundinamarca, celebró el VIII Festival Tejilarte los días 20 y 21 de septiembre de 2025. El evento, que promueve la preservación cultural en el Valle de Ubaté, se llevó a cabo bajo el lema “Lenguaje Nativo”. En Sutatausa, cerca del 15% de sus mujeres se dedican a la tejeduría y la hilandería, incluyendo prácticas como el esquilado, la hilatura y el procesamiento de la lana.
Una convocatoria masiva de artesanos y visitantes
El festival reunió a más de 100 artesanos, músicos, cocineros tradicionales, sabedores ancestrales y miles de visitantes, entre cundinamarqueses y turistas. El evento se consolidó como un espacio de aprendizaje y transmisión de conocimientos, donde niños, jóvenes y adultos participaron en actividades que exaltaron oficios como la tintorería natural, el tejido en lana de oveja, la cestería, la cerámica, el crochet y el macramé.
La inversión total para el festival fue de $215.050.000. El Instituto Departamental de Cultura y Turismo (IDECUT) aportó $200 millones, que incluyeron $50 millones para la dotación de la Escuela de Formación en Tejido. El municipio de Sutatausa contribuyó con $15.050.000.

Inversión sin precedentes para la escuela de tejeduría
Constanza Solórzano, gerente del IDECUT, afirmó que se marcó un “hito histórico” con la entrega de los 50 millones de pesos a la Escuela de Tejeduría, la primera en el departamento. Solórzano aseguró que esta “inversión sin precedentes” garantiza que el legado textil del Valle de Ubaté “se mantenga vivo en las manos de las nuevas generaciones” y que es “el inicio de una nueva era para la artesanía y la cultura del Valle de Ubaté”.
Una programación diversa que rinde homenaje a la tradición
La programación incluyó:
- Concurso de hilanderas y esquiladores.
- Talleres de tintorería, cerámica, crochet, fieltro y el emotivo Telar del Cuento.
- El desfile de moda artesanal “Flor Silvestre: un jardín en la montaña”.
- El desfile “Hoy me pongo la ruana”.
- El Festival de la Memoria, un homenaje a tres mujeres sabedoras.
- Presentaciones culturales, incluyendo dos grupos carrangueros, cinco escuelas de música y tres de danza, con el cierre a cargo de Los Hijos de la Vieja Elvira.
- Una oferta gastronómica con platos tradicionales como el cocido sutatausano, cuchucos, guarapo y chicha.
Además de la celebración, el festival destacó el valor de Sutatausa como destino turístico y cultural. Sus Farallones imponentes, los antiguos caminos reales, el arte rupestre y sus paisajes naturales lo posicionan como un destino ideal para el senderismo, el turismo comunitario y la conexión espiritual con la memoria ancestral.







