Tocancipá, Sesquilé, Zipacón y los centros poblados La Caro (Chía) y Briceño (Sopó) experimentaron inundaciones y situaciones complicadas por las lluvias la tarde de este miércoles (9 de noviembre)
Los reportes de Bomberos Cundinamarca daban cuenta de varias familias afectadas; algunas fuentes hablas de 20 y otras de 50 damnificados entre todos esos sectores.
Durante la misma jornada de las últimas 24 horas, también se vieron resentidos sectores como La Tablita y Yerbabuena Baja. Entre Sopó y Chía varias quebradas desbordaron su caudal alcanzando viviendas, cultivos y pastizales.
Lluvias no bajan intensidad
En Sesquilé nuevamente se notaron algunas dificultades, aunque no alcanzaron a generar problemas delicados. Más al norte de Cundinamarca, en Los Almeidas y límites con Boyacá, población y autoridades permanecían en estado de alerta.
A su vez, en la Sabana Occidente el escenario se mantuvo tenso. Las precipitaciones de la jornada alcanzaron a afectar la vía Zipacón – Cachipay, sector Paloquemao, debido a deslizamientos de tierra. El fenómeno alcanzó a tramos rurales.
En La Calera
Hacia el oriente de Bogotá pero en territorio de Cundinamarca, las lluvias igual se mostraron intensas; varias carreteras veredales fueron alcanzadas por los aguaceros de las últimas horas.
Bomberos en esa ciudad reportaron “encharcamiento” en tres viviendas, e inundaciones del tramo vial entre El triunfo y Márquez. Así mismo, ocurrió desprendimiento de “material granulado” entre El Hato Zona 2 y el Alto de Las Mercedes.
Las autoridades advirtieron sobre nuevas precipitaciones en buena parte del departamento los próximos días.
