Por: Alejandro
Con un grupo especial de médicos comprometidos en procesos sociales provenientes de varios países, en Neiva puso en marcha el programa “Healing The Children” o curando niños, mediante el cual atendieron a cerca de 200 menorcitos de edad con problemas de labio leporino. Siguieron adelante con la campaña iniciada en 1.993 iniciada con el propósito de devolverle la sonrisa a los niños con ese inconveniente físico cuyas familias no poseen los recursos para sumir los costos de las cirugías.
Un grupo especializado de 70 especialistas con alta sensibilidad y sentido social arribó a la capital del Huila, Neiva, con el propósito de operar a niños con labio leporino, paladar hendido, pie chapín, luxación de cadera o secuelas por quemaduras.
Los procesos de alto contenido humanitario fueron facilitados por el Hospital Universitario Hernando Moncaleano Perdomo de esa ciudad, donde se dio apertura a la edición número 22 de la jornada de salud, «Healing the Children» organización humanitaria norteamericana que beneficia con intervenciones médicas de cirugía reconstructiva a niños provenientes de municipios del Huila, Cauca, Caquetá, Nariño, Tolima e inclusive de las regiones del norte del país.
El señor Brigadier General del Aire, José Henry Pinto Rodríguez, Comandante del Comando Aéreo de Combate No. 4 de la Fuerza Aérea Colombiana, acompañó a las cerca de 1.000 familias que añoraban que sus hijos fueran seleccionados para operación; así mismo, llevó con sigo un poco más de alegría, con el Capitán Paz, “el piloto amigo de los niños” y un saltarín que recuerda el avión KFIR.
Vale la pena resaltar que todos los servicios son gratuitos para brindarles a estos niños de escasos recursos la posibilidad de adquirir una mejor calidad de vida, la jornada es promovida por la Cámara de Comercio de Neiva y año tras año se hace realidad gracias a la unión del sector público y privado.
En el desarrollo de la Jornada, personal del Departamento de Accion Integral del Comando Aéreo de Combate N 4 de la Fuerza Aérea Colombiana, acompañó a las familias y realiza actividades de recreación como “globoflexia” o “pintucaritas” para los niños mientras esperan la cirugía que les cambiará la vida.