En el sector salud: mucho tilín – tilín. 100 días a punta de paliativos y ruidos generados por una “ley de punto final” que todavía no se dice cómo es, cuánto cuesta ni cómo va a operar.
Especial Salud
Grupo GES
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A 9 billones, 300.000 mil millones de pesos, asciende actualmente (junio 30/2018) las deudas de las EPS con la red de hospitales y clínicas (184 entidades), que atienden los problemas de salud de su población afiliada.
La Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (ACHC), indicó que, de esa fabulosa cifra, el 57% (5,3 billones), corresponde a cartera morosa de más de 60 días (dos meses).
Las EPS con mayores deudas son: la Nueva EPS, Coomeva y Medimás, del régimen contributivo y, Savia Salud, Asmet Salud y Emssanar, del régimen subsidiado. Las primeras deben 3,9 billones y las segundas, 2,7 billones de pesos y, por los lados de los entes territoriales, el mismo Estado tiene una deuda en cabeza del extinto Fosyga y la actual Adres (Administradora de los Recursos en Salud) de un billón de pesos.
Es decir, en esos tres ítems, se suman deudas en mora por 7,6 billones de pesos de los cuales, $3,8 billones corresponden a EPS con cerca de 20 millones de afiliados, que se encuentran intervenidas, o en vigilancia especial o, definitivamente en liquidación.
Así, ¿cómo van a poder ofrecer un oportuno y buen servicio las clínicas y hospitales a los pacientes –usuarios del sistema de salud en Colombia?
La ACHC demandó con urgencia adoptar mecanismos que alivien las dificultades de flujo de recursos de las clínicas y hospitales como, p.ej., girándoles directamente los dineros a cargo de las EPS que se encuentran en mora y que, además, tengan problemas de solvencia patrimonial, de acuerdo con la lista que tiene en su poder la Supersalud.
«Si no logramos solucionar rápidamente, y de la mejor manera este problema, cada vez nos alejaremos más de la meta de tener una atención en salud con calidad», dice la entidad gremial.
Sobre el particular, el director ejecutivo de la Fundación de Usuarios del Sistema de Seguridad Social Colombiano (Fusissco), José Villamil, pidió al Congreso, en desarrollo del reciente debate de control político al sistema que, «ojalá, las advertencias de la Superintendencia de Salud a las EPS, no se queden solo en eso: en advertencias».
Recordó el líder social que, en el gobierno anterior, tanto el ministro como el superintendente de Salud, le fijaron un plazo “perentorio” a Medimás para que se pusiera al día con sus deudas y con sus afiliados, plazo que se cumplió en agosto, «y no pasó nada».
Villamil advirtió que no se debe esperar a que el Congreso apruebe la nueva herramienta jurídico-administrativa para meter en cintura a las EPS, «porque, si es así, entonces tocará esperar hasta el año entrante para que se hagan efectivas las advertencias, pues, el proyecto no saldrá en esta legislatura».
En opinión del director de Fusissco, el Supersalud tiene en las normas vigentes las herramientas necesarias para castigar a los diferentes actores del sector que no cumplen con su razón de ser. «Esperemos y confiamos en que ahora la entidad no se escude en la no aprobación del proyecto de ley para no hacer lo que le corresponde, porque eso sí sería peor», señaló Villamil.
Como se recordará, el Superintendente de Salud, Fabio Aristizábal, desde su llegada al cargo, ha lanzado fuertes advertencias contra las EPS que no cumplen con los parámetros de habilitación ni con las condiciones financieras para su funcionamiento, ni con su respectiva red integral de prestación de servicios, afirmando que el único camino que les queda es la salida del sistema.
Asuntos prioritarios
La ACHC, en comunicación enviada al ministro de Salud, Juan Pablo Uribe, presentó las siguientes prioridades del sector que se deben resolver cuanto antes:
- Pago de las deudas pendientes de Saludcoop, Cafesalud y Caprecom.
- Pago de Medimás por la compra de Cafesalud.
- Fase IV del plan de choque.
- Relacionamiento y modalidades de contratación entre EPS e IPS.
- Flujo de recursos.
- Definición situación de EAPB (Entidades Administradoras de Planes de Beneficios de Salud) que no cumplen indicadores de permanencia o habilitación financiera.
- Reforma estructural al sistema de salud
100 días buenos, pero…
La ACHC destacó, por último, la gestión del Ministerio de Salud en la consecución de 3.8 billones de pesos adicionales para el presupuesto de 2019, llegando a los 32.3 billones de pesos y pidió que este esfuerzo beneficie de manera equilibrada a todos los agentes del sistema de salud, pero no ocultó la expectativa generada dentro del sector salud por la llamada ‘ley de punto final’ y demandó que se dé a conocer, cuanto antes, el contenido, cronograma y recursos con los que se contará para el desarrollo de dicha ley.
El gremio también pidió al Ministerio de Salud mantener la medida de estabilidad económica que desde 2016 busca garantizar que el porcentaje de incremento que se da en la UPC a final de año, se vea reflejado en el incremento de tarifas de prestación de servicios del siguiente año.
De igual forma, la ACHC solicitó al gobierno nacional preservar la actual destinación específica del 0.5% de IVA Social, como se estableció en la reforma tributaria de 2016, y gestionar los recursos disponibles de regalías por proyectos no ejecutados para que sean destinados al saneamiento del sector salud, incluida las deudas que tienen las EPS
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