*Vías en Gachetá: delicada condición por crudo invierno al oriente de Cundinamarca. Difícil comunicación terrestre en algunas zonas de la Provincia del Guavio. Municipios se encuentran amenazados por la severa temporada de lluvias.
*Por: Nelson Rubiano Rey.
Una compleja situación enfrenta algunas zonas del oriente del departamento debido a las duras precipitaciones de la temporada, condición ante la cual las comunidades llamaron la atención de las autoridades.
Condición particular se registra en Gachetá; en el centro del municipio son ejecutadas varias obras contempladas en el Plan de Desarrollo Municipal, entre ellas el Plan Maestro de Acueducto y Alcantarillado.
Esta intervención requiere la apertura de todas las vías urbanas para la instalación de nuevas redes de tuberías lo cual, sumado al invierno, ha generado un grave deterioro en la movilidad y en la infraestructura vial.
Vías en Gachetá: compleja situación por invierno
A lo largo de los últimos meses los habitantes del casco urbano han enfrentado múltiples problemas de movilidad. Sin embargo, la situación en las veredas es aún más preocupante.
Este municipio, por su riqueza hídrica, cuenta con múltiples subcuencas, quebradas y ríos que alimentan el río Guavio y, posteriormente, el embalse de la represa que genera energía para gran parte del país. Incluso a países vecinos.
Sin embargo, los aguaceros mantienen apretada la situación. Las carreteras rurales presentan múltiples deficiencias: la mayoría carece de alcantarillas, cunetas, recebo y estructuras adecuadas para el paso de agua. Además, muchos puentes se encuentran colapsados o en riesgo de colapsar, dificultando el tránsito de personas, vehículos y productos agrícolas.
Una zona especialmente afectada es la salida del casco urbano en Gachetá hacia las veredas Bombita, Salinas, Monquetiva y Zaque, desde la plaza de ferias. El puente sobre la quebrada Grande, en la vereda Bombita, está en condiciones críticas y podría colapsar en cualquier momento, dejando incomunicadas a cientos de familias.
Más adelante, el puente sobre el río Salinero también ofrece un alto riesgo debido al aumento del caudal provocado por las aguas que bajan de las cordilleras de Guasca y Guatavita.
Inicialmente, la administración departamental había ofrecido un puente militar para ser instalado en la quebrada Grande, en Bombita. Sin embargo, la estructura parece haber sido reasignado al municipio de Manta para ser instalado en la quebrada Quinería. Éste punto también se resintió por la ola invernal afectando la movilidad regional entre Gachetá, Manta, Boyacá y los Llanos Orientales.
Ante este panorama, todos los habitantes de Gachetá formularon llamado urgente a las autoridades departamentales y nacionales para que se asignen recursos y se ejecuten soluciones inmediatas. Para reforzar la petición, los voceros de las comunidades resaltaron el hecho de que ese municipio y la Provincia se constituyeron en una de las más importantes fuentes de alimentos del centro del país.
Ola invernal en Cundinamarca
Según reportes oficiales, hasta la fecha se han registrado 24 personas fallecidas y más de 1.093 familias damnificadas en 72 municipios del departamento. Las lluvias intensas han provocado la destrucción de 13 viviendas y daños en otras 188, además del cierre de 304 vías y afectaciones en 31 puentes vehiculares, nueve sistemas de alcantarillado, 12 colegios y 21 centros comunitarios.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) ha advertido que los suelos en la región están saturados; ello incrementó el riesgo de deslizamientos incluso con precipitaciones moderadas. Municipios como Chocontá, Suesca, Zipaquirá y Girardot se encuentran en alerta roja por posibles crecientes súbitas del río Bogotá, mientras que localidades como Chía, Soacha y Bogotá están en alerta naranja.
Ante la magnitud de la emergencia, el gobernador Nicolás García declaró la "Urgencia Manifiesta" en el departamento, medida que permite agilizar la contratación de obras y la adquisición de suministros para atender la crisis. En ese marco se supo la asignación de $6.000 millones para la rehabilitación de infraestructura, entrega de ayudas humanitarias y despliegue de maquinaria pesada.
Además, la Gobernación ha entregado más de 765 kits de aseo, cocina, frazadas y tejas a las familias afectadas. En municipios como Pacho, La Calera y Villeta, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) ha distribuido dos toneladas de alimentos, ropa y medicamentos a las comunidades damnificadas.
Dificultades en servicios y movilidad
Las fuertes precipitaciones también han impactado la circulación vehicular y el suministro de luz y agua. En Bogotá, se han reportado encharcamientos en vías principales, accidentes de tránsito y suspensión de servicios como el TransMiCable debido a condiciones climáticas adversas.
Enel Colombia implementó una agenda encaminada a garantizar la continuidad del servicio eléctrico; desplegó 244 móviles de emergencia y 500 grupos técnicos en la región. Las acciones incluyen la revisión de redes, cambio de transformadores y poda de árboles cercanos a las líneas eléctricas.
Perspectivas y recomendaciones
El Ideam pronostica que las lluvias continuarán al menos hasta mayo, con precipitaciones entre un 10% y un 40% por encima de los promedios históricos.
Debido a ello, las autoridades recomiendaron a la población mantenerse informada sobre las eventuales amenazas de la temporada húmeda; todo ello con el propósito de inconvenientes en el tránsito una vez ean enterados de zonas inundadas o inestables y proteger viviendas y cultivos con medidas preventivas.
- Recomendado: Primera captura por maltrato animal en Cundinamarca
