Destruían reserva boscosa para elaborar carbón vegetal, en actividad que les dejaba millonarias utilidades a costa de estratégicas áreas ambientales entre Soacha y Sibaté.
Los operativos fueron adelantados por la Décima Tercera Brigada del Ejército Nacional y la Policía, en las veredas Chacua y Piedras Blancas esas dos poblaciones en el centro de Cundinamarca.
Reportes oficiales indican que el grupo, dese hacían seis meses, veía adelantando “actividades ilícitas de procesamiento vegetal y quema de carbón, atribuyéndoles los presuntos delitos de “daños en los recursos naturales y contaminación ambiental, una afectación que tardaría de 10 a 30 años en recuperarse”.
La actividad ilegal les habría dejado utilidades por el orden de los $200 millones de acuerdo a cálculos de las autoridades, estimativos que, junto a numerosas pruebas, fueron presentados ante la justicia colombiana.
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