En el Huila y Valle la Fiscalía también tomó posesión de propiedades del excomandante del frente 42 de las extintas Farc, que sembró terror en buena parte del centro del país incluyendo Fusagasugá, Girardot, La Mesa, Soacha y Sibaté, provincias del Tequendama, Sumapaz y Oriente. La redada cubre 19 inmuebles que figuraban o eran manejados por testaferros de Bernardo Mosquera Machado, como en realidad se llama el exguerrillero.
Dicen las primeras evaluaciones que todos los bienes tienen un valor aproximado a los 20 mil millones de pesos acumulados mediante actividades criminales entre 1.994 y el 2.009, incluyendo, principalmente, extorsiones y secuestros.
Las medidas cautelares se constituyen en el primer paquete dispuesto al amparo de la decisión adoptada por la Corte Constitucional, entregándole a la Fiscalía la competencia para “perseguir y afectar los activos no declarados por la desmovilizada organización o que fueron obtenidos con dineros producto de su actuar ilícito”.
Para tomar la decisión investigadores especiales verificaron el patrimonio de dos grupos familiares que registran inmuebles y establecimientos en Cundinamarca, Huila y Valle del Cauca, y establecieron que, además de no existir ingresos o actividad económica que soportara el aumento de activos, habría indicios sobre su origen ilegal.
“Los bienes afectados superan en valor los 20 mil millones de pesos y están representados en 3 establecimientos comerciales y 16 inmuebles (9 viviendas y 7 fincas que suman 70 hectáreas de tierra). Todos fueron ocupados en diligencias cumplidas por personal del CTI de la Fiscalía, el Ejército Nacional y la Fuerza Aérea Colombiana en Cali (Valle del Cauca), Neiva (Huila), y Bogotá, Viotá y Apulo (Cundinamarca)”, señala un reporte oficial.
Hace pocos días el fiscal Néstor Humberto Martínez había dicho que todo lo incautado con argumentos como los de este caso, serán destinados a la reparación e indemnización de las víctimas del conflicto y quedarán transitoriamente a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) para su administración.
“Bernardo Mosquera Machado, alias Negro Antonio, (hoy tras las rejas), fue durante casi 14 años el cabecilla del frente 42 de las Farc. Su actuar delictivo se concentró, en su momento, en las provincias de Tequedama, Sumapaz y Oriente, en Cundinamarca, y sería uno de los responsables de las denominadas ‘pescas milagrosas’ y otras actividades criminales que le permitieron acumular gran cantidad de bienes, por lo que existen indicios de que sería el real propietario de los inmuebles y establecimientos ocupados por la Fiscalía.
Alias Negro Antonio fue capturado en una operación militar en febrero de 2009 y recientemente se acogió a la jurisdicción de la JEP.
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