La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) ha dado un paso sin precedentes en la conservación de los recursos hídricos al premiar a tres iniciativas comunitarias destinadas a proteger microcuencas con una inversión de 120 millones de pesos cada una. Estas acciones forman parte de un esfuerzo más amplio para recuperar y conservar las microcuencas que abastecen a 800 acueductos en la región, con una inversión total de 140 mil millones de pesos según el Plan de Acción 2024-2027.
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Las iniciativas seleccionadas provienen de diversos puntos del territorio, destacándose tres acueductos veredales: Progresar en La Calera, Coovesur Ltda. ESP en Fusagasugá, y la Empresa Solidaria de Servicios EMSAN ESP en San Miguel de Sema, Boyacá. Estos proyectos fueron reconocidos en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente y son parte de la convocatoria "Entornos sostenibles para la Seguridad Hídrica y la Gobernanza del Agua", lanzada en marzo.
La convocatoria atrajo a 114 organizaciones de 49 municipios. De estas, solo 10 avanzaron a la preselección y finalmente se eligieron tres iniciativas basándose en criterios rigurosos de evaluación. Las prácticas de estas organizaciones incluyen:
- Pedagogía ambiental.
- Planes de reforestación.
- Compra de predios para protección.
- Instauración de cercas de aislamiento.
- Redes de monitoreo participativo.
- Proyectos de polinización mediante apicultura.
- Gestión integral de residuos sólidos.
Estas actividades han convertido a las organizaciones seleccionadas en modelos a seguir para futuras convocatorias. La diversificación de prácticas y la colaboración con las comunidades son esenciales para garantizar la sostenibilidad y eficacia de estas acciones.
"Nuestro compromiso es garantizar el abastecimiento de agua a través de acciones integrales de conservación, de la mano con las comunidades y asociaciones de acueductos, logrando un trabajo armónico que permita generar estrategias para la seguridad hídrica”, afirmó Alfred Ignacio Ballesteros, director de la CAR. Este compromiso se refleja en el Plan de Acción Cuatrienal 2024-2027, donde se han dispuesto los recursos necesarios para alcanzar estos objetivos ambiciosos.
El programa también incluye un diagnóstico rural participativo y la implementación de un plan de adecuación ambiental. Estos pasos se llevarán a cabo mediante la firma de acuerdos de conservación con las comunidades, impulsando una gobernanza robusta en el territorio.
Ballesteros subrayó la magnitud del proyecto indicando: “Es la primera vez que la CAR lidera un proyecto masivo con la inversión de recursos más grande de la historia de la entidad en un modelo que busca garantizar que las fuentes hídricas recuperen su función ecosistémica". Esta declaración resalta el carácter innovador y el alcance de los esfuerzos emprendidos por la CAR.
La iniciativa no solo busca mejorar las condiciones medioambientales sino también fomentar una colaboración efectiva y sostenida con las comunidades locales. Al enfocarse en el modelo participativo, la CAR aspira a crear entornos más sostenibles y resilientes a largo plazo.
Finalmente, la CAR hace un llamado a todas las organizaciones de acueductos y Juntas de Acción Comunal de su jurisdicción a sumarse a esta ambiciosa apuesta de los próximos cuatro años. La invitación es a trabajar conjuntamente en la conservación y recuperación de las microcuencas que alimentan a los 800 acueductos veredales, regionales y municipales. La colaboración y el esfuerzo colectivo son fundamentales para alcanzar los objetivos de sostenibilidad propuestos.
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