VIDEO. No respetaban ni a las personas en condiciones de discapacidad. Imágenes captaron numerosos casos que facilitó su medida de aseguramiento; era el azote de turistas.
Se habían especializado, según las acusaciones, en robar, mediante “raponazo”, a viajeros y transeúntes en zonas turísticas tanto en Girardot, Ricaurte y Anapoima, Cundinamarca, como en Flandes y Carmen de Apicalá, Tolima.
De sus andanzas se habían enterado las autoridades a mediados del año pasado, momento desde el cual se dieron a la tarea de ubicarlos, recaudar pruebas, documentar las acusaciones y presentarlos ante la justicia colombiana.
En juicioso trabajo, los agentes especializados establecieron el modus operandi de la banda; todo indica que adelantaban recorridos diarios cerca de hoteles y balnearios, presumiblemente, con el propósito de identificar posibles víctimas.
Una vez escogían las víctimas y caracterizaban por sus prendas de vestir y rasgos particulares, pasaban esa información a uno de sus compinches para que materializara el robo.
Ya ante la justicia y debido a la contundencia de las pruebas, los siete indiciados fueron cobijados con medida de aseguramiento luego que aceptaran cargos.
Son acusados de hurto calificado y agravado en concurso con concierto para delinquir.
Las decisiones cobijan a José Luis R. B., Omar Andrés R. B., alias Chigüi; Félix Manuel R. V., alias Guerrillero; Cristian David F. B., alias Carelápida; Juan Carlos L. G., alias Careniña; Héctor David R. D., alias David y Orlando V. A., alias Carevieja.
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