Había sido condenado por otro homicidio perpetrado en el 2.019; a pesar de su peligrosidad un Juez le concedió el beneficio, condición que aprovechó para, presuntamente, continuar con sus fechorías.
Esta vez los investigadores de la Fiscalía y la Policía Nacional lograron recaudar las pruebas que nuevamente lo enviaron tras las rejas en donde permanecerá mientras sigue el juicio en su contra, salvo que otro administrador de justicia le vuelva a conceder la casa por cárcel.
De acuerdo a los señalamientos, Jackson Javier C. D., alias “Calvo”, quien aceptó los cargos debido a la contundencia de las pruebas, disparó tres veces contra Wilfrido Murcia Naranjo, un guarda de seguridad que intentó oponerse a un atraco masivo dentro del bus del SITP en el cual se movilizaba.
Ocurrido el crimen (madrugada del martes 15 de diciembre) en el barrio Quiroga, sur de Bogotá, unidades del CTI y Sijín de la Policía Metropolitana, unieron esfuerzos investigativos que permitieron aclarar el crimen en solo cuatro días.
Los hechos
De acuerdo a la reconstrucción del sangriento caso, el confeso criminal, le hizo la parada al bus y, una vez adentro, desenfundó un arma de fuego; encañonó al conductor obligándolo a entregarle el celular para luego hacer lo mismo con ocho pasajeros que habían tomado el vehículo.
“Al ver lo que sucedía, el señor Wilfrido Murcia Naranjo, supuestamente, se lanzó contra el asaltante e intentó evitar el hurto masivo con un palo que utilizaba en su trabajo como vigilante. Alias el Calvo reaccionó en su contra y le propinó tres disparos”.
En su reacción el asesino salió corriendo, abandonó el SITP y subió a una motocicleta en la cual escapó; en su precipitada huida el acusado dejó caer varios celulares y otros elementos que, parece, facilitaron su identificación, ubicación y captura.
Ayudaron también registros de varias cámaras de seguridad al igual que otras pruebas, entre las cuales se encuentran posibles grabaciones y mensajes a través de celulares.
Con ello lograron reconstruir la planeación del atraco “y de las conversaciones o reuniones, posteriores al crimen, en las que Castiblanco Durán reconoció haber disparado contra el usuario del SITP”.
Ahora el mismo hampón es acusado de homicidio agravado; fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego agravado; y hurto calificado y agravado.
Le puede interesar: Vacuna contra el Covid-19 priorizada en Cundinamarca : Nicolás García
Pico y cédula con toque de queda mantiene en expectativa a Fusagasugá
Pasca recibe aportes de la Gobernación por $2.000 millones para obras
A puñaladas mató a su mujer para luego suicidarse en Tenjo, Cundinamarca
